Cinco sismos se registraron este viernes en algunas zonas de Costa Rica, y el más fuerte tuvo una magnitud de cuatro en la escala abierta de Ritcher con el epicentro cerca de las costas del Pacífico, informaron autoridades.
El temblor sacudió a la provincia de Guanacaste sin que se reportaran daños humanos o materiales, y la causa es la subducción (deslizamiento) de la placa del Coco bajo la del Caribe, según el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica.
Los epicentros de los demás movimientos telúricos se ubicaron en el territorio continental y no fueron perceptibles, excepto por los sismógrafos.
El último gran temblor fue de 7,6 grados en septiembre de 2012, y afectó principalmente a la Península de Nicoya, en el oeste del país.
Ese sismo ocasionó dos muertos y graves daños materiales; es considerado, por su intensidad, el segundo mayor de la historia sísmica nacional.
Marino Protti, especialista de Ovsicori, aseguró que estas son réplicas del terremoto de Nicoya porque desde entonces a la fecha a tierra no ha dejado de moverse.
Hasta marzo último se registraron unos cinco mil temblores como consecuencia del fuerte evento, de ellos, mil 200 ocurrieron en las primeras 72 horas del terremoto, explicó recientemente la fuente.
Hasta ahora el registro récord de un sismo en la zona fue el ocurrido el 22 de abril de 1991 con una magnitud de 7,7 grados en la escala de Richter.
Afectó a la provincia costarricense de Limón, al este de esta capital y a Bocas del Toro, en Panamá, ambas en el Caribe, donde perdieron la vida 127 personas, de ellas, 48 en Costa Rica.
Después de este último, como consecuencia del acomodo de las placas, la costa quedó un metro por encima de su nivel anterior.