Según investigadores|La clave para el combate contra cáncer puede estar en el ADN

Investigadores descubrieron en el genoma humano, en particular en células cancerosas, una hélice cuádruple del ADN que podría ser responsable del crecimiento de las células cancerosas.

El descubrimiento hecho por los investigadores de la Universidad de Cambridge y publicado en la revista ‘Nature Chemistry’ reveló que la ‘hélice cuádruple’ también existe en las células del ser humano.

De acuerdo con el profesor del Departamento de Química de esta casa de estudios, Shankar Balasubramanian, “estas estructuras pueden estar presentes cuando la célula tiene cierto genotipo o estado disfuncional”.

Balasubramanian añadió que “si se logra controlarlas, se podría encontrar nuevas formas de combatir el cáncer”.

Las estructuras, identificadas mediante biomarcadores fluorescentes, recibieron el nombre de G-quadruplex, donde la letra ‘G’ se refiere a la guanina, uno de los cuatro grupos químicos que mantiene unido el ADN y codifica la información genética, junto con la adenina, la citosina y la timina. El G-quadruplex tiende a formarse en presencia de altas cantidades de guanima.

Balasubramanian explicó que durante la investigación lograron vincular la concentración elevada de hélices cuádruples al proceso de replicación del ADN que controla la división celular. Al tomar control sobre este proceso, se puede detener el desarrollo del cáncer: para eso hace falta atacar los cuádruples con moléculas sintéticas para que bloqueen estas funciones y no permitan al ADN replicar la estructura, según creen los investigadores.

Informó Balasubramanian que “muchos tratamientos para el cáncer se centran en el ADN, pero tenemos que jugar a ciegas, porque ni siquiera sabemos exactamente dónde reaccionan con el genoma. Esperamos que esta hélice llegue a ser un objetivo útil y claro para el tratamiento”.

La existencia del ADN, “la molécula de la vida”, fue descubierta hace 60 años, en febrero de 1953, por los científicos James D. Watson y Francis Crick, también de la Universidad de Cambridge, (Inglaterra).

Este trabajo les supuso el premio Nobel diez años después, pero desde entonces el ADN se ha conocido como una estructura de doble hélice.

Fuente/teleSUR
Foto/Nature