Tras visita del presidente Juan Manuel Santos a París|Colombia promoverá educación rural con respaldo de Francia

Colombia fortalecerá la educación rural en seis zonas del país con la cooperación de Francia, acuerdo derivado de la reciente visita del presidente Juan Manuel Santos a París, reseñaron este jueves diarios locales.

Los centros educativos estarán inspirados en el modelo de enseñanza francés destinado al sector agropecuario, el cual resulta amigable con el medio ambiente, precisó el ministro de agricultura Aurelio Iragorri citado por el periódico El Espectador.

Según el experto, el propósito de la iniciativa es fomentar el desarrollo del campo colombiano sobre bases científico-técnicas, además de estimular la permanencia de los campesinos en sus tierras, sobre todo de los más jóvenes.

Las primeras aulas, anticipo de un programa más ambicioso, estarán ubicadas en regiones del Pacífico, el Atlántico, el centro, oriente y sur de la nación, además de la Orinoquía, con la finalidad de garantizar el alcance nacional del proyecto.

Iragorri explicó que el acuerdo firmado en París genera un compromiso por cuatro años durante los cuales Francia hará transferencias de conocimientos a Colombia, aunque no hay un pacto financiero entre los dos países, aclaró.

De acuerdo con analistas, tal idea será decisiva para implementar las transformaciones del ámbito campestre acordadas durante los diálogos entre representantes gubernamentales y de las FARC-EP, negociaciones surgidas con el fin de terminar el conflicto interno.

Voceros del Gobierno y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) platican en Cuba desde 2012, uno de los consensos logrados en la mesa de concertación apunta hacia la modificación integral del escenario rural, incluidas las condiciones de vida de sus habitantes.

Las mejoras estructurales del sector agropecuario concentrarán una parte importante de los esfuerzos durante la llamada etapa del postconflicto, diseñada con anticipación por el Ejecutivo.

Prolongada durante más de 50 años, la confrontación castigó con mayor severidad a las comunidades campesinas, mermadas por el fenómeno del desplazamiento forzado y también por las migraciones voluntarias para evadir la violencia.

El 86 por ciento de las víctimas del período bélico clasifican como desplazadas.

Partes oficiales registran 6,8 millones de personas perjudicadas directamente por la guerra en el país andino.

Fuente/Prensa Latina