Las comunidades indígenas del pueblo Ngöbe Buglé de Panamá se mantienen en pie de lucha, mientras esperan este miércoles la reanudación del diálogo con el Gobierno de presidente Ricardo Martinelli, en el que se intentará llegar a un acuerdo sobre la posible construcción de hidroeléctricas en las tierras de los originarios.
Consultado por la Agencia Venezolana de Noticias (AVN), Saúl Méndez, del Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales (Frenadeso) de Panamá, señaló que por ahora «se ha avanzado en cuanto a las exigencias del pueblo Ngöbe Buglé».
El dirigente señaló igualmente que existen «maniobras por parte del Gobierno para tratar de confundirlos, pero la movilización del pueblo Ngöbe Buglé y de las organizaciones solidarias se mantiene, por lo cual hay vigilias en todas partes del país».
Desde el miércoles pasado las comunidades indígenas y el Ejecutivo sostienen una mesa de diálogo en la Asamblea Nacional, donde discuten las exigencias de los pueblos originarios.
El pueblo Ngöbe Buglé rechazó desde un principio la instalación de hidroeléctricas en sus tierras ancestrales, en tanto acordó con el Gobierno que la actividad minera en sus comarcas y áreas anexas será vetada.
Luego de varios días de protestas, entre el 5 y 7 de febrero las comunidades fueron duramente reprimidas por la policía, lo que arrojó dos manifestantes asesinados, cerca de 50 heridos y más de 100 detenidos.
Méndez manifestó que los pueblos originarios todavía mantienen denuncias, «que se extienden hasta el grado de violaciones de niñas indígenas y abusos a mujeres» por parte de los uniformados.
«Hay personas que los pueblos han declarado como desaparecidas, además de los procesos judiciales que están abiertos contra los dirigentes indígenas», afirmó el integrante de Frenadeso.
Méndez remarcó que «las comunidades, por lo que han manifestado, están en pie de lucha. Lo que sus voceros han dicho públicamente es que se van a mantener en la misma posición si el Gobierno no cede a sus reclamos».
Aseveró que el pueblo Ngobe Buglé está «dando una cátedra de dignidad, de lucha social y de moralidad. Creo que nuestro pueblo originario ha removido lo más sentido del pueblo panameño, por eso el pueblo está solidario con las comunidades originarias».