La Corte Suprema de Justicia condenó a tres ex congresistas colombianos a cuatro años y siete meses de prisión e inhabilitación de sus ejercicios por proteger y promover a grupos paramilitares en el país.
De acuerdo con la sentencia del máximo tribunal colombiano, los ex funcionarios a la Cámara de Representantes Manuel Ávila, Enrique Doval y César Andrade “aceptaron los cargos por el delito de concierto para delinquir agravado”.
El documento detalla que los tres políticos fueron condenados a las principales penas de “55 meses de prisión» y a la inhabilitación para el ejercicio de derechos y funciones públicas por un periodo similar a la privativa de libertad.
«Pretendiendo obtener representación en el Congreso de la República» de Colombia, las organizaciones de extrema derecha desarrollaron un plan político regional en el noroeste del país, indicó la Corte.
A través del mencionado proyecto, denominado Por una Urabá Grande, Unida y en Paz, «durante las elecciones del año 2002, obtuvieron (los paramilitares) una curul en la Cámara de Representantes por el departamento (provincia) de Antioquia».
Los ex representantes de Antioquia se acogieron a sentencia anticipada el 16 de agosto, ante los magistrados de la Sala Penal del Tribunal. Ellos aceptaron haber recibido apoyo político del Bloque Élmer Cárdenas de las AUC, encabezado por el ex jefe Fredy Rendón Herrera, alias El Alemán, para conseguir una curul en el Congreso.
Para entonces, Manuel Darío Ávila, pidió disculpas a su familia y al pueblo de Urabá.
“Quisiéramos pedirle perdón a nuestras familias, al pueblo de Urabá y a toda la sociedad colombiana y queremos que sepan que actuamos con el convencimiento errado de que nuestro proceder en ese momento no era ilegal”; sostuvoel ex congresista.
Los políticos también integraban el grupo de Los Cuatrillizos, al que supuestamente pertenecía el ex alcalde de Turbo (Antioquia), Etanislao Ortiz, el único que no aceptó su responsabilidad en el delito imputado por la Fiscalía y continuará en juicio.
La sentencia agregó que una vez alcanzado el curul cuatro líderes de la región, entre ellos los tres políticos condenados, se turnaron el cargo año tras año.
Más de cien políticos colombianos se han visto involucrados con grupos de la extrema derecha, en tanto, la justicia busca aclarar los nexos entre estos dirigentes y las supuestamente desmovilizadas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC, extrema derecha) para obtener resultados electorales.
En 2010, un total de 10 ex parlamentarios fueron condenados y uno absuelto. Mientras que en lo que va de año, otros nueve han sido imputados por la Corte, entre ellos dos ex presidentes del Congreso y un ex gobernador.
Las AUC, que intentaban combatir a la izquierda colombiana, cometieron miles de crímenes contra la población civil, especialmente en los años 90.
Entre 2003 y 2006, participaron en una negociación de paz que les otorgó beneficios procesales a cambio de la confesión y la reparación a las víctimas. A raíz de esas comparecencias la justicia abrió investigaciones a los dirigentes políticos.