El principal partido de oposición en Bahréin, Al-Wefaq, denunció este viernes la detención indebida de cuatro fotógrafos por las fuerzas del régimen dominante de Al Jalifa; al tiempo que piden la liberación de todos los presos políticos y activistas defensores de Derechos Humanos en el país árabe.
La denuncia fue hecha a través de un comunicado en el cual expresan que las acciones del Gobierno se deben principalmente, al afán de evitar que se incremente su imagen dañada ante la población bahreiní y tapar sus crímenes cometidos contra los defensores de la democracia en este país.
La nota citada por el secretario general de Reporteros Sin Fronteras (RSF), Christophe Deloire, hizo hincapié en la necesidad de combatir la impunidad, como una prioridad para la comunidad internacional.
Desde el 14 de febrero de 2011, Bahréin es escenario de manifestaciones reprimidas por las fuerzas de seguridad para demandar la libertad de los presos políticos, la retirada de las fuerzas saudíes del país y el fin de la monarquía autoritaria, en el poder desde hace más de 40 años.
De hecho el parlamentario persa Seyed Naser Musavi Lariyani, manifestó recientemente que el régimen bahreiní de Al Jalifa, está aprovechando la desatención de la comunidad internacional, concentrada actualmente en los avatares en Egipto por el reciente derrocamiento del presidente Mohamed Mursi, para intensificar la escalada de represiones contra los opositores de Manamá (capital bahreiní).
“Mientras que las organizaciones internacionales están ocupadas con los acontecimientos en Egipto, el régimen de Al Jalifa está tratando de extinguir las llamas de la revolución popular en el país mediante la intensificación de la represión contra el pueblo de Bahréin”, expresó.
De igual forma comentó que el aumento de la represión popular en Bahréin enciende la alarma al régimen dominante, advirtiendo que Al Jalifa sufrirá el mismo destino que tuvieron los anteriores dictadores en la región, ha precisado.
Las medidas brutales del régimen bahreiní han sido criticadas en reiteradas ocasiones por organizaciones pro derechos humanos como Amnistía Internacional (AI), el Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés) y Reporteros Sin Fronteras.