Republicanos echarán para atrás los pocos beneficios que contempla|La derecha de Estados Unidos quiere acorralar a Barack Obama por su reforma de salud

El 21 de marzo del año pasado fue aprobada en el Congreso de Estados Unidos, con 219 votos a favor y 212 en contra, la reforma al sistema de salud propuesta por el presidente Barack Obama.

Quienes se opusieron a la medida fueron los 178 legisladores republicanos con los que contaba en ese entonces la Cámara de Representantes. Sin embargo, gracias a la pasada distribución del Parlamento, la ley pudo ser aprobada.

Se trata del proyecto legal en materia de salud más importante de los últimos 40 años en ese país, y costará alrededor de 940 mil millones de dólares en los siguientes 10 años, según estimó la Oficina de Presupuesto del Congreso.

En su discurso posterior a la aprobación de la norma, Obama señaló que la reforma “no solucionará todos los problemas” pero “nos llevará de forma definitiva en la dirección correcta. Estamos respondiendo al llamado de la historia”.

PUNTOS SOBRESALIENTES

Dentro de sus propuestas, se incluye la creación de una serie de opciones de seguros de salud diseñados para que los pequeños negocios, trabajadores independientes y desempleados puedan obtener recursos y recibir una cobertura menos costosa.

La cobertura médica estatal de Medicaid sería ampliada significativamente, con lo que se aseguró el servicio a las familias de cuatro integrantes que perciban alrededor de 29 mil dólares anualmente.

En entrevista con el Correo del Orinoco, el integrante del grupo de comunicación Pueblos sin Fronteras de Los Ángeles, California, Fernando Velázquez, manifestó que los promotores de la ley aseguran que entre sus beneficios se cuenta que las personas ya no verán su póliza cancelada porque se enfermaron o tuvieron un accidente.

“Además, las aseguradoras ya no podrán revisar los antecedentes médicos de los pacientes y cancelar su póliza porque se olvidaron mencionar que tenia acné en su niñez, por ejemplo, o cualquier otro problema de salud”.

La norma también dicta que los pequeños empresarios recibirán un descuento de 35% en el costo del seguro médico de sus empleados y la posibilidad de que un grupo de personas rechazadas por las aseguradoras compren un seguro de manera colectiva.

“Ordena además la creación de un programa para jubilados prematuros, el mismo que servirá para pensionados de entre 55 y 64 años de edad que tengan problemas para costear un seguro más caro”, sostuvo Velázquez.

Las aseguradoras ya no podrán negar cobertura médica a las niñas y los niños con condiciones preexistentes, y las hijas e hijos podrían ser parte de la póliza de salud de sus padres hasta la edad de 26 años.

“Los centros de salud comunitarios recibirán financiamiento para casi doblar el número de pacientes que se benefician con sus servicios; habrá nuevas inversiones y aumentará en todo el país el numero de profesionales para el cuidado medico primario: más doctores, enfermeras y asistentes de salud”, resaltó el comunicador.

Se permitirá, según Velázquez, que las consumidoras y los consumidores apelen decisiones hechas por aseguradoras privadas sobre su plan de salud; las compañías ya no podrán discriminar a las personas por su ingreso económico y se terminará la practica de alzas irrazonables sobre precios de seguro médico.

El comunicador indicó que según Margaret Flowers, quien copreside el capítulo de Médicos por un Programa Nacional de Salud en Maryland y la organización Phisicians for a National Heath Program, lo más sobresaliente y positivo de la nueva ley es el aumento al financiamiento de los centros de salud comunitarios.

“La ley hará posible un incremento del número de personas que reciben seguro médico pero desafortunadamente no será suficiente para cubrir sus necesidades o protegerlos de irse a la bancarrota si contraen una enfermedad seria”, advirtió.

¿PARA BENEFICIO DE LAS MAYORÍAS?

“El texto de la ley fue redactado con una profunda influencia de las empresas que lucran con el cuidado medico y el resultado fue una legislación que no llena los requisitos del caso ni permite que se maximice el servicio adquirido con los dólares aprobados para gastos médicos de la nación. ¿Acaso esta ley satisface las necesidades medicas de los estadounidenses? Tristemente, no”, señaló el comunicador.

Para Flowers el país desperdicia mucho dinero en servicios administrativos, en pagos a compañías privadas: “La ley sólo empeoró la situación haciendo el sistema más complejo. Lo correcto hubiera sido proveer cuidado médico a todo mundo, y con ello se hubiera ahorrado dinero”.

En septiembre de 2010 la oficina del censo reporto casi 51 millones de personas sin seguro médico en Estados Unidos.

Con base en un reporte de la Kaiser Family Foundation USA Today, Velázquez informó que 47% de las y los estadounidenses pagan más dinero por seguro médica familiar actualmente que en 2005, mientras que a los empleadores sólo les cuesta un incremento del 20%.

“El costo anual de seguro médico por familia es actualmente de 14 mil dólares. También se estima que hay tres veces más posibilidades de que una familia de bajos recursos carezca de seguro médico que otra con ingresos superiores a los 75 mil dólares al año”, añadió.

A juicio de Velázquez, unos de los sectores más golpeados con esta realidad es el de las personas entre 18 y 64 años de edad “pues los menores de 18 y mayores de 64 pueden recibir el seguro de Medicare pagado por el Gobierno”.
“La ley ordena que toda persona tenga seguro médico, pero el Estado no está dispuesto a pagar por el servicio”, enfatizó.

REPUBLICANOS VS REFORMA

Desde que los republicanos consiguieron la mayoría en el Congreso estadounidense en las pasadas elecciones legislativas de noviembre del pasado año, comicios en los que su lema fue la austeridad fiscal, advirtieron que su plan de trabajo tendrá como uno de los principales objetivos revocar esa reforma de salud.

Y así lo ratificaron el pasado 5 de enero durante la instalación del nuevo Parlamente. En la Cámara de Representantes poseen 242 escaños (es decir, 49 más que los demócratas) y se requiere una mayoría simple de 218 votos para aprobar leyes. El número de nuevos miembros en la Cámara Baja es de 87 republicanos y 9 demócratas.

Para Flowers posiblemente esa actitud del bando opositor a Obama corresponda con la intención de derrotar al actual presidente en 2012 y no con una real crítica a la norma.

“Los triste de eso”, dice la doctora, “es que los que quieren anular la legislación no tienen nada que ofrecer a cambio a las personas que se benefician con ella, especialmente cuando el país enfrenta una crisis de salud. Están muy ocupados en su política partidista y no les preocupan las necesidades del pueblo”, indicó Fernando Velázquez.

T/Yamila Blanco
F/ AFP
Caracas