El Gobierno nicaragüense descartó el racionamiento de energía a causa de la sequía que afecta hoy a esta nación centroamericana y otros países de la región.
El ministro de Energía y Minas, Emilio Rappacciolli, explicó que con el desarrollo de varios proyectos renovables Nicaragua logró elevados niveles de abastecimiento y el sistema interconectado nacional cuenta con la capacidad de reserva necesaria.
Aun así, advirtió que la escasez de lluvias afectó en alguna medida la producción de energía a base de plantas hidroeléctricas, pues el caudal de ríos y el nivel de los embalses descendieron.
Rappaccioli también se refirió a comunidades ubicadas en zonas aisladas y que reciben el suministro de energía a través de pequeñas o micro centrales hidroeléctricas, las cuales pueden sufrir afectaciones.
El titular explicó que el plan de atención a la sequía impulsado por el Gobierno para mitigar el impacto de la sequía da seguimiento a esta situación, a fin de tomar medidas preventivas para un suministro alternativo de electricidad a las familias ubicadas en esas comunidades.
El Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) reveló que esta sequía está relacionada con el fenómeno climatológico El Niño, y es la peor que registra el país en los últimos 30 años.
Los especialistas del Ineter anunciaron que las condiciones de déficit de lluvias se mantendrán durante septiembre y octubre del actual año.