El diputado por Primero Justicia, Julio Montoya, describió como intensa la agenda que está llevando a cabo en España por el interés de saber “los mecanismo que se usaron para detectar el tema de lavado de dinero en el banco de Andorra que generó el cierre del banco Madrid”.
Aseguró que traerá a Venezuela las pruebas que, según dijo, demuestran los ilícitos entre funcionarios del gobierno y las empresas españolas, indicó Unión Radio. “El pueblo tendrá información de los delitos cometidos con empresas españolas que le entregaron comisiones a funcionarios del gobierno”, dijo.
Montoya se desvinculó de los hechos en los que se vio involucrada su actual esposa, luego que el embajador venezolano en España Mario Isea lo tachó de presunto corrupto.
El dirigente se reunió ayer (martes) en el Congreso con diputados de los principales partidos españoles, a los que explicó las conexiones entre el gobierno de su país y el partido español Podemos, a través de supuestos pagos recibidos por una fundación vinculada a esa formación.
Dialogó con diputados del gubernamental Partido Popular (PP, centroderecha), Partido Socialista (PSOE), principal grupo de la oposición, y UPyD (centro), a los que explicó dicha conexión a través de supuestos pagos recibidos hasta 2014 por la Fundación Centro de Estudios Políticos y Sociales (CEPS), cercana a Podemos.
El embajador de Venezuela en España, Mario Isea, tachó ayer de «corrupto» al opositor, de quien dijo que «no tiene moral para dar clases de ética» ni en su país «ni en ninguna parte del mundo».
En una declaración a Efe, con motivo de la visita de Montoya al Congreso de los Diputados de España, Isea manifestó que «es para nosotros indignante que quienes financian esta millonaria campaña negra contra Venezuela traigan a personajes de este tipo, que deberían causarle vergüenza a la propia oposición venezolana».