Los directivos de la Escondina, la mina de cobre más grande del mundo, no comparecieron a la cita pautada para este martes en la Dirección del Trabajo de Chile para resolver el conflicto iniciado hace cinco días por más de dos mil trabajadores que paralizaron las actividades. Este miércoles ya sumarán más de nueve mil empleados en huelga.
El vocero del Sindicato de Trabajadores de Mina Escondida, Marcelo Tapia, informó que la «minera Escondida no se presentó y sólo entregó un oficio en el que agradecía la intención de la Dirección del Trabajo de mediar en el conflicto con los trabajadores».
En tanto, agencias de noticias detallaron, de acuerdo con nota divulgada por la página Web de Telesur, que portavoces de la empresa advirtieron sobre una posible medida de despido a los trabajadores en huelga.
Además están negados a establecer conversaciones con el sindicato mientras mantenga la paralización de las faenas, acción que consideran ilegal.
El 57,7 por ciento de la administración de la mina se encuentra en manos de la anglo-australiana BHP Billiton. El paro de los dos mil 300 trabajadores afectó las distintas líneas de producción.
Marcelo Tapia anunció que a la huelga se sumarán unos siete mil contratistas, para alcanzar más de nueve mil trabajadores paralizados.
Al mismo tiempo, los abogados de los trabajadores interpondrán una serie de demandas en los tribunales, denunciando medidas antisindicales de parte de la empresa y presiones sobre los trabajadores sumados al conflicto.
El mayor reclamo de los trabajadores refiere a un bono extraordinario anual por concepto de producción de unos 11 mil dólares para cada uno de los operarios. Mientras, la empresa ofrece cerca de sies mil dólares.
Escondida produce más de un millón de toneladas anuales y 6,8 por ciento del cobre extraído a nivel mundial.
Chile es el principal productor mundial de cobre, con unas 5,6 millones de toneladas anuales.