Este miércoles|Disuelven Gobierno tunecino en medios de protestas

El primer ministro tunecino, Hamadi Jebali, anunció este miércoles la disolución del Gobierno y la formación de un gabinete de unidad nacional tras el estallido de disturbios por la muerte de Chukry Belaid, un líder opositor.

Jebali dijo en una alocución televisada que no tomó la decisión sin consultar a ningún partido ni personalidad, sino «sólo pensando en hacer mi trabajo».

La comunicación ocurre mientras se registran violentas protestas frente a la sede del Ministerio del Interior, a cuyos jefes apuntan los índices acusadores de líderes opositores y de la población por la muerte de Belaid, líder del Partido de los Patriotas Democráticos, un acerbo crítico del Gobierno, esta mañana en un atentado.

El presidente tunecino, Mohamed Moncef Marzouki, y el secretario general del partido islamista moderado Ennahda (en el Gobierno), Rachid al Gannouchi, condenaron el atentado, pero sus declaraciones fueron insuficientes para acallar las protestas.

Marzouki dijo que «los perpetradores (del atentado) son enemigos de Túnez, de la democracia y del Islam» en una intervención transmitida por la televisión después que se anunciara que el mandatario suspendió su participación en la XII Cumbre de la Organización para la Cooperación Islámica que se realiza en El Cairo, la capital egipcia.

Este crimen divide aún más a la sociedad tunecina, admitió el mandatario, mientras Rachid al Gannouchi, secretario general de Ennahda calificó el hecho de «atentado terrorista sin precedentes en Túnez».

Por su parte, Jmour Mohamed, un miembro de la oposición laica, culpó al Ministerio del Interior, el Gobierno y el partido Ennahda del asesinato «por alentar la violencia política»; en protesta por el atentado, los delegados de partidos laicos e izquierdistas abandonaron las labores de la Asamblea Constituyente.

Los manifestantes demandan la caída del Gobierno mientras marchan por la céntrica avenida capitalina Habib Bourguiba, escenario de la revuelta desatada a fines de 2010 tras la inmolación por el fuego de un joven desempleado al que agentes incautaron y destruyeron un carromato con el cual vendía vegetales.

Protestas de mayor violencia se registraron en las ciudades centrales de Mezzouna y Gafsa, donde protestantes allanaron e incendiaron dos oficinas de Ennahda; en Sidi Bouzid, Beja y Bizerta también ocurrieron disturbios, acorde con testigos.

Belaid era un crítico acerbo del Gobierno y acusaba en sus discursos responsabilizaba a los ministerios del Interior y de Justicia por no reaccionar ante la creciente violencia ejercida por entidades islamistas contra las agrupaciones laicas a las que acusan de ser remanentes del régimen anterior.

Fuente/PL