Pese al llamado de defensores de derechos humanos en Estados Unidos para evitar el sufrimiento innecesario durante ejecuciones de condenados a muerte, Ohio aplicó este jueves una droga que le provocó a un reo 13 minutos de agonía.
El cóctel, compuesto por dos drogas: el sedante midazolam y el analgésico hidromorfona, derivado de la morfina, fue suministrado a Dennis McGuire, condenado en 1994 por violar y asesinar a puñaladas a una joven de 22 años.
Durante un tiempo se usó una combinación de tres sustancias para la inyección letal: un anestésico, un agente paralizante y otro para detener el corazón.
Sin embargo, la compañía que lo suministraba detuvo la producción de la misma y muchas casas farmacéuticas europeas se negaron a su comercialización para ser usada en la pena capital, ya que la Unión Europea se opone a este método.
Por ello, ante la escasez de tales drogas el Departamento de Corrección y Rehabilitación de Ohio introdujo un cambio en la manera en que realizaba las ejecuciones para permitir «el uso del midazolam, un sedante, y la hidromorfona, un analgésico», dijo la vocera de la dependencia, JoEllen Smith.