La economía alemana se resintió en 2012 al registrar el Producto Interno Bruto (PIB) un crecimiento de solo 0,7 por ciento, frente al tres por ciento obtenido en el ejercicio anterior, informó este martes una fuente especializada.
Según la Oficina Federal de Estadística, el PIB se contrajo 0,5 por ciento en los últimos tres meses del pasado año, un dato que no sorprendió a los expertos.
La economía alemana se ha visto afectada gradualmente por la crisis que afecta a la zona euro, dentro de la cual es considerada la locomotora del bloque.
No obstante, analistas prevén que los indicadores del país mejoren relativamente durante el primer trimestre del año en curso, con lo cual se evitaría la recesión tras dos trimestres seguidos de repliegue.
En tanto, las exportaciones, principal motor de la economía alemana, crecieron 4,1 por ciento en 2012, mientras las importaciones lo hicieron 2,3 por ciento, de acuerdo con las cifras disponibles.
A su vez, el comercio repuntó apenas 1,1 por ciento, mientras el consumo privado aumentó 0,8, pese a que las inversiones se redujeron fuertemente, en particular en los bienes de equipo, con una contracción de 4,4 por ciento.
Por el momento, el gobierno alemán observa con cautela la proyección económica para 2013, con una previsión de crecimiento del PIB en torno al 0,5 por ciento, según trascendidos.