![Jay Carney](/wp-content/uploads/2011/05/PRE_jay_carney.jpg_869080375.jpg)
El Gobierno de Estados Unidos (EE.UU.) defendió este lunes la actuación del Ejército sionista israelí cuyos efectivos abrieron fuego contra las manifestaciones palestinas con motivo de los 63 años de la catástrofe del Nakba, dejando al menos 23 palestinos muertos.
La Casa Blanca dijo que Israel “tiene derecho a impedir” cruces no autorizados en sus fronteras, e instó a la población palestina a la “moderación máxima”.
«Israel, como el resto de los países, tiene derecho a impedir cruces no autorizados en sus fronteras. Sus vecinos tienen la responsabilidad de prevenir estas acciones (…) Instamos a las partes a la moderación máxima», dijo el portavoz de la Casa Blanca (sede del Gobierno estadounidense), Jay Carney.
Agregó que Washington “lamenta la pérdida de vidas» y aseguró que «nuestros pensamientos están con las familias y seres queridos” de las víctimas del accionar bélico del Ejército de Israel, contra cientos de manifestantes que marchaban en varios puntos fronterizos.
El Gobierno de EE.UU acusó a Siria de “alimentar” las protestas palestinas para “distraer” la atención frente a la “represión” contra los manifestantes opositores al Gobierno de Bashar al Assad.
«Nos parece evidente que se trata de una tentativa de distraer la atención frente a las legítimas protestas del pueblo sirio y a la represión violenta ejercida por el Gobierno sirio contra su propio pueblo», dijo Carney.
Soldados israelíes reprimieron este domingo a manifestantes palestinos en las fronteras de Siria, Líbano, Gaza y en Altos del Golán, territorio ocupado también por Israel desde 1967, con un saldo de 23 muertos y decenas de heridos.
Diez muertos en la frontera de Israel con Siria, 10 en la frontera con Líbano, dos en el Golán, uno en Gaza y decenas de heridos fueron los saldos dejados por las represiones israelíes.
En un breve discurso televisado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que ordenó a los militares actuar con “la máxima moderación, pero que nadie se equivoque. Estamos resueltos a defender nuestras fronteras y soberanía”.
Por su parte, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, afirmó también en un discurso televisado que la sangre de los palestinos muertos este domingo “no ha sido en balde”.
«Su sangre ha sido derramada por la libertad del pueblo palestino y por sus derechos”, expresó.
Afirmó que la elevada participación de manifestantes en el día del Nakba es la prueba de que “el deseo de la gente es mayor que el poder de las fuerzas ocupantes”.
Este lunes, Israel mantuvo a sus fuerzas de seguridad en pie de guerra en las fronteras de Líbano y Siria.