La embajadora de Estados Unidos ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Susan Rice, afirmó este viernes que Washington está enfocado en trabajar con los «Amigos de Siria» al margen de este organismo para llevar «ayuda» humanitaria a la población siria.
«Dado lo ocurrido el día de ayer (jueves) EE.UU. está enfocado no tanto en trabajar en este Consejo de Seguridad, que ha llegado a una calle sin salida, sino en intensificar nuestro trabajo fuera del Consejo con los ‘Amigos de Siria’, que piden la resolución» sobre la nación árabe, declaró Rice desde las Naciones Unidas, en Nueva York (noreste estadounidense).
«Seguiremos apoyando a los ‘Amigos de Siria’ y trabajando con las sanciones y con las ayudas humanitarias para darle al pueblo de Siria lo que necesiten», enfatizó.
Rice dijo que en Siria «hay muchas circunstancias que pudieran pasar y situaciones que podrían surgir, no quiero especular de los escenarios que se podrían generar si las circunstancias son tales».
Asimismo, manifestó que el voto de este viernes de extender un último periodo de 30 días a la misión de observadores en Siria «no era lo que esperaba Estados Unido. Nuestra preferencia era adoptar la resolución vetada ayer con el fin de brindar una última oportunidad».
Este jueves, Rusia y China utilizaron por tercera vez su derecho a veto en el Consejo de Seguridad de la ONU contra una resolución presentada por países occidentales que amenazaba con sancionar al Siria ante la crisis política que está presentado desde hace un año y que ha sido fortalecida con la intromisión de potencias imperiales.
Tras ese fracaso, el Reino Unido presentó un proyecto de resolución que contempla «una ampliación final» de la misión por treinta días, con el respaldo de los países occidentales.
El secretario general de la ONU Ban Ki-moon «lamentó profundamente» la incapacidad del Consejo de Seguridad para adoptar una resolución sobre Siria.
Ante la situación, Ban exclamó que «la votación de hoy es decepcionante, precisamente en el momento en que se hubiera necesitado mayor determinación y de presión para concretar los objetivos defendidos por el Consejo de Seguridad, entre ellos el cese de la violencia y el inicio de una transición política».