Expresó Fernando Lugo|Es un bien mayor aceptar «juicio político» para evitar derramamiento de sangre

El presidente constitucional de Paraguay, Fernando Lugo, manifestó que los verdaderos motivos del “juicio político” que concluyó con su derrocamiento “no salieron a la luz” y que es necesario que organismos internacionales investiguen los sucesos en Curuguaty, porque en este país las averiguaciones “no son suficientemente científicas y objetivas para dar a conocer la verdad que tiene que aflorar.”

Lugo recordó que en el país se desconoce lo que sucedió en marzo de 1999, cuando murieron ocho jóvenes en lo que se llamó «Marzo Paraguayo». “¿Se sabe quién realmente mató al vicepresidente (Luis María) Argaña?, interrogó reflexivamente a los periodistas extranjeros.

“Querían repetir el Marzo (Paraguayo) y este Presidente no podía aceptar ni siquiera la posibilidad de que eso pudiera repetirse” y para evitar violencia, muerte y derramamiento de sangre “me tuve que someter a un juicio político”, añadió.

Lugo consideró que “es un bien mayor aceptar someterse a un juicio político injusto, sin razón, y salvaguardar las vidas humanas que no tienen precio”.

Llamó a la ciudadanía “a ejercer el derecho a la manifestación, a la indignación. Este Presidente (Lugo) ni siquiera va a insinuar el ejercicio de la violencia y menos de personas contra personas”.

La clase política tradicional de este país dio un “golpe al proceso democrático, a los más olvidados, a quienes recibían ciertos aportes del Estado para poder sobrevivir mínimamente. Aquí se hizo un golpe contra las políticas públicas y sociales de este gobierno”, dijo Lugo, y explicó la necesidad de una reforma agraria, pero el Poder Judicial debe sanear los múltiples títulos de propiedad sobre los terrenos en el país.

“Cuando comenzamos en el gobierno queríamos hacer una genuina reforma agraria para tener un catastro de la tenencia de la tierra. Paraguay tiene 406.752 km2 y sumando todos los títulos hay 529.000 km2. Es decir, hay terrenos que tienen dos, tres y cuatro títulos. Eso se tiene que sanear, pero eso no es fácil porque depende de la judicialización, del Poder Judicial, y no del Poder Ejecutivo”.

Para el presidente constitucional su gran diferencia con la clase política tradicional paraguaya es ser “sapo de otro agujero”.

“No provengo de una clase política, de los partidos políticos tradicionales. No tengo el ejercicio de un liderazgo político como se hace tradicionalmente aquí en Paraguay. Esa fue mi diferencia con la clase política que me enjuició políticamente el viernes pasado (en el Parlamento)”.

El presidente Lugo sólo tuvo el apoyo de cuatro senadores en el “juicio político” que se realizó en 24 horas y tan sólo tuvo dos horas para su defensa en la cámara del Senado el viernes pasado. El alegato acusatorio fue “mal desempeño” de sus funciones y tomaron como excusa las extrañas circunstancias en que murieron 11 campesinos y seis policías en Curuguaty, departamento de Canindeyú, a 240 km de la capital (noreste).

“Hay mucha más indignación, de no aceptación de este gobierno (de facto) y que la gente, sin medios, pero con una conciencia cívica, está comenzando a manifestar su indignación”, concluyó Lugo.

Para este miércoles el Frente por la Defensa de la Democracia convocó a una movilización general en la capital, Asunción.

Texto/AVN