La alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navy Pillay, considera que el Día Internacional en memoria de las víctimas del Holocausto, que se celebra hoy, es «necesario para asegurar que los jóvenes aprendan la importancia de sus palabras y actitudes hacia los que son diferentes a ellos».
En un comunicado, Pillay defendió la necesidad de que las nuevas generaciones «aprendan del pasado y conozcan la importancia de eventos históricos, incluso algunos terribles, para que puedan estar vigilantes a todo tipo de manifestaciones de odio».
La alta comisionada recordó que hace más de 60 años, durante el Holocausto, se acabó con la vida de millones de hombres, mujeres y niños judíos, así como con comunistas, personas con discapacidad y homosexuales.
«El terrible y cruel tratamiento que se hizo de millones de personas, no puede borrarse de la historia de la humanidad, y cada año debemos convertirlo en un punto que recordar», defendió.
Finalmente, opinó que la conmemoración del Holocausto sirve como recordatorio de los peligros de la discriminación y la intolerancia y de la importancia de una intervención temprana «para evitar que una tragedia de esta magnitud vuelva a ocurrir».