Habitantes del municipio colombiano de Caloto, situado en el norte del departamento del Cauca (oeste), exigen este viernes la responsabilidad de las fuerzas militares por el asesinato de un civil desarmado durante enfrentamientos sostenidos entre las fuerzas del orden e indígenas de la región.
El hecho se registró en la víspera cuando manifestantes bloquearon una carretera que comunica a Caloto con otro municipio, en reclamo a la salida del Ejército y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia de la región.
Por la situación intervino la fuerza pública lanzando bombas lacrimógenas, acción en la que también se registró intercambio de disparos. Personas que estuvieron en el lugar aseguraron que el hombre falleció tras haber sido impactado por una bala de fusil.
La corresponsal de teleSUR en Colombia, Angie Camacho, reportó que en un intento de diálogo entre las comunidades y el Ejército, “un poco lo que han señalado los líderes de la zona es que cuando ellos intentaron conversar inmediatamente este hombre fue impactado por una bala”.
“En este momento se lleva a cabo el velorio del campesino (…) Las personas de la comunidad han dicho que están esperando a los organismos de derechos humanos para que sean garantes de lo que aquí pasó”, agregó Camacho.
Por su parte, el comandante de las Fuerzas Militares, Alejando Navas, precisó que durante el enfrentamiento con los indígenas, en el que murió un campesino, a los soldado les estaban disparando con fusiles a AK47 desde una zona montañosa.
“No no cabe la menor duda que esta es la guerra de las masas de las FARC, empleando a los indígenas y a la población campesina como escudos (…) Sabemos que están usando a la población como elementos de perturbación para desalojar las bases, taponar las vías y todo lo que hemos visto estos días”, agregó.
Navas indicó que algunos integrantes de la Fuerza Pública también resultaron heridos durante las protestas que tuvieron lugar en la víspera.
Entre tanto, miles de campesinos e indígenas de 13 municipios del departamento de Putumayo (suroeste) se congregaron en la capital departamental Mocoa en la denominada marcha por la vida, el territorio, la soberanía, la dignidad y en apoyo a los habitantes del Cauca.
Al respecto, Angie Camacho informó que la marcha registra este viernes movilizaciones hacia la zona de Cúcuta (noreste), para que la lucha de los campesino sea escuchada más que nunca, pues los manifestantes señalaron que es hora que el gobierno los escuche.
“Han dicho que el Cauca inició solo, pero que empezó a convertirse en un efecto dominó para que todas las movilizaciones indígenas puedan concluir en Bogotá (la capital) en una gran mesa de diálogo, que según manifestaron, es un gran escenario y en ese sentido empieza a crecer la movilización en todo el país que se va a ver reflejado en la mesa de negociación del próximo lunes”, añadió la periodista.