Este lunes se registraron dos fuertes atentados con carros bombas en la Zona Verde de la capital iraquí, donde resultaron fallecidas nueve personas, mientras otras 23 recibieron heridas graves.
El atentado que ocurrió a las 08:30 hora local (0500 GMT) de acuerdo con un reporte de las autoridades de seguridad, se produjo luego que dos suicidas se inmolaron en la entrada 12 de la Zona Verde, en la parte oeste de la ciudad que comunica al distrito de Al-Qadisiyah.
En la zona donde se produjo el atentado se ubican varias sedes diplomáticas de occidente y edificios gubernamentales, además de la oficina del primer ministro y el Parlamento.
Todas esas sedes se encuentran fuertemente vigiladas, por esa razón entre los fallecidos se suman cinco soldados y 13 entre los heridos, reseñó un despacho de Prensa Latina.
La misma fuente señaló que las autoridades anunciaron el hallazgo de un importante depósito de armas y municiones, el reporte oficial detalló que el decomisó constó de obuses antitanque, fusiles de francotiradores, granadas de mano y bombas trampa todos hallados en el distrito Nuevo Bagdad.
En otro punto de la ciudad dos cargas explosivas detonaron en las inmediaciones de una venta de licor situadas en el distrito sureste de Nuevo Bagdad y en la calle Al-Nidhal, en el centro de la urbe.
Ambas detonaciones no dejaron víctimas fatales, sin embargo tanto los comercios como los carros de civiles estacionados en las cercanía sí resultaron dañados.
Hasta el momento ningún movimiento se ha endosado la autoría de los hechos, no obstante algunos medios de comunicación los atribuyeron a musulmanes radicales quienes anteriormente expresaron su incomodidad por la venta de bebidas alcohólicas, cuyo consumo es considerado «haram» (pecado) por el Islam.
En Iraq se encuentra un contingente del ejército de los EEUU ocupando al país y protegiendo sus bases militares e instalaciones petroleras operadas por empresas estadounidenses y de otros países europeos desde hace ocho años.
Simultáneamente un reporte de Comando de Operaciones de Bagdad (COB) dio cuenta de otro atentado, donde cuatro civiles iraquíes resultaron lesionados tras registrarse fuertes explosiones en la carretera del distrito central de Jadiriya, próxima a la Universidad de Bagdad.
Más temprano el director general del ministerio de Finanzas, Alí Abu-Naila, sufrió un atentado cuando un grupo de desconocidos fuertemente armados, abrió fuego contra la caravana de vehículos donde se trasladaba el ministro en compañía de su asesor, mientras recorrían la carretera Mohammed Al-Qassim, del sureste capitalino.