Un niño de cinco años fue asesinado y otras seis personas resultaron heridas por obuses de morteros lanzados por grupos armados contra la ciudad de Yaramana, en las inmediaciones de esta capital, informaron este viernes fuentes policiales sirias.
Entre los lesionados hay tres menores, según un oficial de ese cuerpo, citado por televisoras nacionales.
Esta semana fallecieron dos civiles, uno de ellos un niño, por ataques similares contra el campamento de refugiados palestinos de al Wafideen, en la provincia de Damasco Campo.
Más de 200 mil personas han muerto desde el inicio del conflicto, en marzo de 2011, y millones se vieron obligadas a abandonar sus hogares.
El gobierno de Damasco acusa a potencias occidentales y regionales de armar y financiar a las bandas extremistas que combaten en Siria.