Según los datos del Banco de España, la deuda de las familias volvió a subir el pasado noviembre hasta situarse en 798 millones de euros.
Con la llegada del nuevo año y la fiebre de comprar regalos, el undécimo mes del 2013 fue testigo de un aumento de 0,52 % de la deuda familiar mientras que, por el mismo motivo, la deuda de las empresas bajó en noviembre un 0,49 % y sumó 1 084 billones de euros, el nivel más bajo desde marzo de 2007.
Por otro lado, el repunte de noviembre se debió principalmente en el avance del 0,14 % de los créditos hipotecarios, hasta 616.028 millones de euros –el 77,1 % del endeudamiento total– y por el incremento del 1,6 % de la deuda por créditos al consumo, hasta 178.993 millones de euros.
Mientras tanto, la razón de la caída interanual de las deudas empresariales se puede explicar por el descenso de los préstamos de entidades de crédito residentes y los préstamos titulizados fuera de balance que se redujeron un 14,6 %, hasta los 662.790 millones de euros.
La inversión en el sector de la construcción, una de las fuentes principales de ingreso en España, ha caído notablemente a lo largo de la crisis, con cifras equivalentes al total del endeudamiento.
La economía de España va hacia el derrumbe afectada por la crisis financiera mundial; una situación por la cual el país europeo se ha visto obligado a adoptar serias medidas de austeridad contra las que el pueblo español ha protestado y continúa haciéndolo.
A finales del pasado diciembre, el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, durante la presentación del balance de la gestión del Ejecutivo 2013, aseguró que la recuperación económica y la reducción del número de parados serán posibles en 2014.
Las declaraciones de Rajoy se produjeron mientras que la crisis económica y la tasa de desempleo han aumentado en los últimos meses en ese país europeo.