Felipe Mujica, secretario general nacional del Movimiento al Socialismo (MAS), considera que el hecho más destacado del año 2013, por sus connotaciones políticas, fue la muerte del presidente Hugo Chávez.
“En un hecho que no se puede obviar por lo que significó el ejercicio de la presidencia de Chávez, por lo contradictorio y la forma en que la misma fue asumida. Nosotros hemos señalado que fue un periodo autoritario y que llevó a desconocer instituciones y prácticas democráticas en el país” que dejaron un saldo de división y de violencia en la sociedad venezolana.
A pesar de las críticas, Mujica reconoció el peso político del comandante supremo: “Una cosa es ser críticos de Chávez, y otra cosa es no reconocer también lo que implica desde el punto de vista histórico”.
Otro acontecimiento relevante para el dirigente masista es la, a su juicio, fragmentación del país.
En este sentido, refirió que los resultados de los comicios del 14 de abril fueron cerrados y controversiales: “No fue posible que todo el país los asumiera de una misma manera, sino que todavía el país está pagando las secuelas de lo que ha significado la confrontación en torno a si Maduro es o no el Presidente, si es o no legítimo, si se utilizaron mecanismos de ventajismo electoral. Esa controversia sigue abierta”.
PIENSA QUE HAY DOS MINORÍAS
En cuanto a las elecciones municipales, señaló que la participación fue menor: “Estamos en presencia de dos minorías: una minoría que no vota y una minoría que vota de manera distinta y que no respalda el esquema polarizante que se está construyendo en Venezuela. Creo que está claro que cuando se hace la sumatoria de los números, nos conseguimos que cada uno de los pedazos son minoritarios frente al resto del país que no participó, que no se sintió convocado por dicho proceso electoral”.
A su juicio, estos comicios no pueden faltar en un análisis político para ponderar hacia donde va el país “porque la necesidad de que los venezolanos nos reconozcamos y entremos en un camino que nos vayan vinculando al diálogo y al reconocimiento” es cada vez mayor.
Agregó: “El país ha ido identificando, al margen de la controversia política, la necesidad del diálogo y la reconciliación. Todos los estudios de opinión indican que el principal problema para los ciudadanos es la inseguridad, seguido por el desabastecimiento. Los sectores consultados han manifestado la necesidad de que se inicie un diálogo. Más del 82% de los venezolanos son abiertamente partidarios del diálogo”.
Subrayó que para que el país pueda avanzar hacia la búsqueda de soluciones es indispensable que se produzca un debate: “Que sea un diálogo abierto cuya única condición previa sea el respeto a la Constitución y el reconocimiento al que está participando en el diálogo. De otra manera no tendría sentido el diálogo”.
Para Mujica ese reconocimiento implica “reconocer que Maduro es el Presidente de la República y que Maduro reconozca que todos los alcaldes fueron electos de la misma manera que él fue electo, y que no debe profundizar la práctica de desconocimiento por la vía de la creación de autoridades administrativas” compitiendo con las facultades que tiene cada uno de los mandatarios locales.
No obstante, manifestó que el reconocimiento entre ambas partes es un proceso difícil. Planteó que es imprescindible que en Venezuela se construya el pluralismo y el respeto a los componentes de la sociedad.
RECTIFICACIÓN
Con respecto al comentario del presidente Maduro sobre la necesidad de rectificar,
Mujica manifestó que se deben evaluar los resultados de los comicios del 8 de diciembre.
Según Mujica, los resultados electorales indican por una parte que el Gobierno es una fuerza minoritaria, frente al resto del país: “No es mayoría”.
Dijo que el presidente Maduro debe colocarse al frente de un Gobierno “en el cual los venezolanos nos podamos sentir representados”.
Expresó que “está claro que el Gobierno solo no puede resolver los problemas del país y que requiere de la participación y la ayuda del resto de los sectores; la rectificación debe propiciar soluciones, a partir del diálogo; la principal rectificación que el Gobierno debe hacer es producir una apertura que nos permita generar confianza, seguridad y tranquilidad”.
LA MUD NO TIENE ESTRATEGIAS
En cuanto al papel que le tocará jugar a la oposición, el secretario general nacional del MAS, Felipe Mujica, señaló que “es evidente que la MUD es un escenario para los acuerdos electorales. Allí no hay ninguna estrategia política, allí no hay ninguna visión a largo plazo”.
Comentó que “si en verdad se quiere construir una alternativa, esa alternativa tiene que tener una vinculación con los conflictos sociales, tiene que ser lo suficientemente amplia y debe propiciar el diálogo y la reconciliación”.
Manifestó que la exigencia de dialogar no solamente corresponde al Gobierno: “Esta exigencia es también para quienes están agrupados en torno a la MUD. La negativa a la posibilidad de dialogar emerge de los sectores radicales del Gobierno y de la oposición, que son minoritarios ambos. Y en el medio de esos dos sectores minoritarios está la sociedad venezolana que requiere salidas”.
Finalmente apuntó que “la aspiración del país es que desde el Gobierno surja una clara iniciativa que no tuviese limitaciones y cortapisas que impiden que al final se haga nada, y que solamente se establezca como condición la necesidad de poder dialogar en función de resolver los problemas”.