El Ministerio de Salud confirmó que 24 personas han muerto en Egipto aquejados por la fiebre porcina, pero negó que entre los fallecidos haya médicos, según una comunicación circulada hoy.
Desde diciembre pasado han sido ingresados 195 sospechosos de contagio y la dolencia se ha esparcido en particular a través de ciudades del delta del Nilo, norte, y esta capital, acorde con las precisiones.
Entre los infestados hay dos galenos, pero uno fue dado de alta y el otro se encuentra en situación estable, aseguraron la víspera las autoridades sanitarias.
Los sectores más vulnerables son los niños y los adultos jóvenes, dijo el jefe del departamento de Medicina Preventiva del Ministerio de Salud, Amr Qandeel, quien instó a quienes presenten los síntomas a buscar atención médica a la mayor brevedad.
El número de contagiados se explica por el hecho de que la enfermedad se transmite entre humanos incluso aquellos que no tienen contactos con ganado porcino.
Aunque un país de mayoría musulmana, a quienes su credo les prohíbe la ingestión de carne de cerdo por impura, en Egipto existe una minoría cristiana copta que la consume y en esta capital hay carnicerías especializadas en su expendio a la población.
En 2009 las autoridades egipcias ordenaron el sacrificio y destrucción de 300 mil cerdos que se empleaban en la eliminación de los desperdicios orgánicos de esta capital en la cual residen unos 20 millones de personas, sin contar la numerosa población flotante que no aparece en las estadísticas.