A una semana del paso del tifón Haiyan en Filipinas, miles de supervivientes continúan a la espera de las donaciones internacionales, ya que los habitantes están desesperados por la lentitud con la que éstas llegan.
La enviada especial de teleSUR al país asiático, Paula Mónaco, entrevistó desde la localidad de San José una comunidad de pescadores al este de Filipinas a Lozando Castillo Junior, Presidente de la Asociación Pueblo de Pescadores.
Castillo dijo que “desde el miércoles y jueves mandamos un aviso a los residentes de la localidad para realizar una evacuación le dijimos que debían subir a tierras más altas porque se esperaba un fuerte tifón”, también indicó que “algunos escucharon los avisos y se dirigieron a los refugios”.
“Sin embargo algunos residentes por resguardar sus cosas y equipamientos de pesca se quedaron (y no respondieron a la orden de evacuación), debido a eso la mayoría de los miembros de pescadores murieron”, dijo.
Afirma que por ahora lo único que pueden hacer es esperar las donaciones internacionales.
Mónaco desde Cebú (Región de Bisayas, centro) aseguró el pasado miércoles que son pocos los vuelos y ferrys disponibles tanto para que llegue la ayuda a las zonas más afectadas como para que las víctimas puedan salir de esos lugares. Al respecto, una de las sobrevivientes señaló que “el Gobierno nos está decepcionando porque no estamos recibiendo ningún tipo de ayuda”.
El Gobierno aseguró que la cifra oficial de víctimas es de casi dos mil personas, mientras que medios locales y la Cruz Roja estiman que el número de afectados supera las 10 mil personas.