La fondista noruega Marit Bjoergen logró este sábado su tercer título olímpico en Sochi en los 30 kilómetros, con lo que sumó la sexta medalla de oro en su carrera para un total de 10 preseas, igualando el récord como mujer más laureada en los Juegos de Invierno.
‘Gull Marit’ (‘La dorada Marit’) iguala así a dos leyendas rusas de los deportes invernales, la patinadora de velocidad Lidia Skoblikova y la fondista Lyobov Yegorova, como las mujeres con más títulos olímpicos de la historia de los Juegos de Invierno.
“No lo pensaba, más bien pensaba en cada carrera. Este año, lo que quería realmente era el oro en esta distancia (los 30 km)”, explicó la esquiadora tras la prueba.
“Cuando deje de esquiar, ya pensaré en las medallas. Cuando termine mi carrera podré pensar en las medallas que gané. Ahora no me preocupa”, añadió Bjoergen, quien no descartó continuar la cosecha de medallas olímpicas en 2018 en Pyeongchang, en Corea del Sur.
“Cuatro años es mucho. No estoy rejuveneciendo, también estoy pensando en tener una familia, ya se verá. Si estoy motivada haré los Juegos (de 2018), pero es difícil saber que haré dentro de cuatro años”, declaró.
EXPERIENCIA
Bjoergen, que ya se convirtió en la atleta más veterana en colgarse un oro olímpico al ganar el skiatlón femenino al inicio de estos Juegos y después mejoró su récord con la victoria en el esprín por equipos, ha dejado finalmente la marca en 33 años y 338 días.
No sólo Bjoergen demostró el poderío noruego en el esquí de fondo o nórdico, una disciplina que es una religión en el país escandinavo.
Sus compatriotas Therese Johaug y Kristin Stoermer Steira lograron la plata y el bronce para completar un podio 100% noruego, algo que no se daba en unos Juegos desde Albertville-1992, cuando Vegard Ulvang, Björn Daehlie y Terje Lagli ganaron la prueba de los 30 km en estilo clásico (en categoría masculina).
El último triplete en categoría femenina se produjo, en los 20 kmts. clásicos, en Calgary-1988, con el triunfo de las soviéticas Tamara Tichonova, Ansifa Reztsova y Raisa Smetanina.
El trío noruego imprimió un ritmo endiablado en la carrera a partir del kilómetro 10, haciendo añicos el grupo cabecero, en el que también estaba la polaca Justyna Kowalczyk, campeona olímpica de la distancia en estilo clásico.
VICTORIOSAS
Las noruegas continuaron acelerando y a mitad de carrera ya habían sentenciado el podio, con la única duda de cómo se repartirían las medallas, mientras Kowalczyk, aún renqueante de una lesión en el tobillo, tiraba al toalla.
La española Laura Orgue, con 27 años y en su tercera cita olímpica, logró una muy meritoria 10ª plaza, a poco más de un segundo y medio de la campeona olímpica.