Los miembros de la plataforma coruñesa Stop Desahucios, congregados en la calle Padre Feijóo lograron el lunes evitar el desalojo de una anciana que no pagó un mes de alquiler.
Unos 200 manifestantes, formando una cadena humana en torno al edifico donde reside Aurelia Rey, de 85 años impidieron la entrada de los policías para hacer efectiva una orden de desahucio emitido por el Tribunal Superior de Xustiza.
Los manifestantes, golpeados por agentes de la policía, gritaban consignas contra el sistema económico capitalista, contra las administraciones públicas y contra la justicia, lo que obligó al tribunal suspender dos veces la orden de desalojo y al final decidió fijar una nueva fecha.
“Servicios Sociales son criminales” y “Aurelia se queda, Aurelia no se va” fueron algunos de las lemas más coreadas por los manifestantes.
España afronta una grave crisis económica, la cual ha provocado despidos masivos, además de que muchos ciudadanos se han visto imposibilitados de pagar los compromisos económicos y se han visto desalojados de sus casas.
Varios casos de desahucios en este país europeo condujeron a suicidios. Desde el inicio de la crisis económica, hace cuatro años, más de 350.000 familias han perdido su vivienda por el impago de sus préstamos hipotecarios al banco.