Con una tertulia finalizó la exposición Portafolio mexicano de la Galería Cubo 7|Gasparini: “Paul Strand me decía que retratar la batalla humana es también un problema estético”

La tarde del sábado fue ocasión para que el fotógrafo Paolo Gasparini develara en una tertulia la cercana y cálida vinculación que mantuvo con el famoso fotógrafo estadounidense Paul Strand, considerado uno de los fundadores de la fotografía documental moderna. El conversatorio se realizó en el contexto de la exposición del norteamericano Portafolio mexicano en la galería Cubo 7 de la Hacienda la Trinidad y fue el cierre de esta muestra inaugurada en octubre del año pasado.

La actividad se inició con la proyección de la película Redes (1936), original de Strand y Agustín Velázquez Chávez y dirigida por los cineastas Fred Zinnemann y Emilio Gómez Muriel. Basada en hechos reales, retrata la situación de explotación y dominación en la que se encontraba una población de pescadores cuyo trabajo era subpagado en relación con la cantidad de horas laboradas. La historia pasea a las espectadoras y los espectadores por la faena diaria de la pesca, la toma de conciencia de los pescadores ante su injusta situación y luego su rebelión contra el patrón.

Culminada la película, una fotografía de Strand, su esposa y Gasparini en Apartaderos (Mérida) dio inicio al conversatorio donde el fotógrafo ítalo-venezolano develó la relación profesional y de amistad que mantuvo por mucho tiempo con el artista norteamericano.

UNA LARGA CORRESPONDENCIA

Gasparini contó que la relación comenzó cuando le envió a Strand una carta acompañada de una incipiente serie fotográfica de Catia, San Agustín del Sur y otras parroquias populares. Al norteamericano le parecieron “muy interesantes” las fotos e inmediatamente se ofreció para ayudarle a mejorar su trabajo y a asesorarlo en lo que necesitara, según Gasparini.

De allí comenzó una larga correspondencia entre ambos fotógrafos llena de sugerencias a nivel técnico, debates conceptuales, impresiones y opiniones acerca del trabajo del entonces joven Gasparini. Strand fue su maestro, Gasparini confiesa que su carrera fotográfica se la debe a él.

El fotógrafo venezolano, quién leyó algunos fragmentos de su correspondencia con Strand, afirmó que el trabajo del norteamericano lo influenció notablemente. De hecho, cuenta, que en los inicios de su carrera trabajó con la misma metodología, el mismo formato y hasta con el mismo equipo que usaba Strand. En lo que sí se diferenció desde el principio fue en el acercamiento que Gasparini lograba con la gente que fotografiaba, “siempre me gustó conversar con la gente, explicarles por qué estaba fotografiando”, expresó. Al contrario de éste, Strand tenía métodos muy precisos para fotografiar a las personas sin ser visto, incluso creó un dispositivo para ocultar el lente, pues la espontaneidad de las y los fotografiados era lo que más le interesaba.

RETRATAR LA BATALLA HUMANA

El fotógrafo italo venezolano rememoró: “Strand me decía que retratar la batalla humana es también un problema estético”, inclusive éste siempre aseguraba que la mayor dificultad residía en hacer foto realista y no en “inventar relaciones abstractas supuestamente puras”.

“Strand siempre estuvo muy apegado a la palabra realidad”, señaló Gasparini quien contó que algunas personas  le comentaban que sus fotos eran muy estáticas. Strand respondía que entendía la fotografía como “el esfuerzo para retratar, transcribir, transportar lo que estamos viendo”, recordó Gasparini. “Las fotografías de Strand siempre están sujetas a la historia, a los acontecimientos que ocurrían cuando y donde fueron captadas”, aseguró.

CONSEJOS

Paolo Gasparini se tomó el tiempo de leer al público asistente a la tertulia algunos consejos que Paul Strand le ofreció, a través de sus cartas, para alcanzar un mejor y más impecable trabajo fotográfico. Entre ellos están:

La utilización del Nelson Gold Toner para las ampliaciones de fotografías, que otorgaba una riqueza de tonos marrones, sepias, dorados. “No es un revelador, es un entonador de impresiones”, decía Strand.

Otro de los consejos era usar la mayor variedad de tipos de papel para las impresiones, esto con el propósito de discernir las diferencias de cada uno y encontrar el que mejor se adecuaba a cada fotografía.

La experimentación con los materiales era una gran preocupación de Strand, quien sugería probar con todos los que estuviesen disponibles en el mercado. “El defecto de todos los fotógrafos y quiero decir todos, incluyéndome a mí, es la tentación natural de mecanizar el medio, usar un papel, un tamaño, un color, etc. Los materiales son tan pobres, tan carentes de toda cualidad que es fácil aceptar uno que no sea demasiado malo y no ocuparse más del asunto. El fotógrafo tiene el problema de recrear los materiales disponibles, de hacerlos bellos y expresivos”, aseguraba Strand en una carta a Gasparini.

“VIVIENTE SIGNIFICATIVA”

Sobre la composición, Paul Strand decía “Una fotografía es una superficie plana de dos dimensiones que debe dar la ilusión de ser tridimensional. En una imagen, sea fotografía o pintura, cada parte debe ser viviente y significativa”

TRABAJAR PERSONALMENTE

En relación con los proyectos editoriales como el fotolibro, Paolo Gasparini cuenta que Paul Strand le recomendaba mucha atención con los derechos de autor pues sentía gran desconfianza por las y los editores.

En lo referido a los formatos y diagramación del fotolibro Strand sentenciaba los siguientes principios básicos: “No puedes aceptar el 16×21 bajo ninguna circunstancia, es un formato muy malo”; “No sangrar ninguna fotografía y no permitas que nadie lo haga en la diagramación”; “No hagas páginas abultadas con fotografías demasiado pequeñas”; “Busca variedad en la diagramación”; “Es una enfermedad internacional cortar las fotografías”.

Gasparini destacó la insistencia de Strand en trabajar personalmente con los diagramadores, los tipógrafos y los editores para “vigilar” todos los detalles del fotolibro y evitar que estos profesionales intervinieran en una forma que desmejorara la calidad de la publicación.

T/ Diana Moncada
F/ Jonathan Manzano
Caracas