La actividad se realizó en el Centro de Formación Especial Bella Vista|La Generación de Oro compartió con las y los jóvenes de Caracas

Sentados en un pequeño salón improvisado en el patio, las y los estudiantes del Centro de Formación Especial Bella Vista, ubicado en Caracas y dedicado a personas con síndrome de Down, escuchaban atentos cada una de las vivencias que Naomi Soazo, medallista paralímpica de Beijing 2008, les transmitía.

Soazo explicaba pasajes de su carrera, mientras que al frente los jóvenes guardaban silencio y ansiosos movían sus manos. Todos querían intervenir en la charla que el Gobierno del Distrito Capital puso en marcha y que lleva por nombre La Generación de Oro le habla a Caracas,

En primera fila José Zambrano, de 22 años, fue de los primeros en hablar. “Yo quiero seguir haciendo deportes. Disfruté mucho compartir con los atletas, ellos nos motivan a seguir estudiando. A mí me gustaría darle también una medalla al país como lo hicieron ellos”.

Zambrano, quien por la tardes juega baloncesto, confiesa que este tipo de actividades son de gran provecho para ellos. Antes eran olvidados. Él fue solo uno, de los más de 30 estudiantes que maravillados escuchaban a Soazo, Elvin Vargas (judo), así como a Yonelvis Moya y Gerson Anchetta, ambos de atletismo.

EMOCIÓN

La apreciación de Zambrano fue compartida por Soazo, quien explicó que esta iniciativa se extenderá por diferentes centros educativos del Distrito Capital.

“Queremos que estos muchachos sepan que ellos también pueden ir a competencias y llevar en alto nuestro tricolor nacional. También que vean que los atletas de alto rendimiento somos de carne y hueso y que ellos pueden ser como nosotros”, resaltó la judoca.

Soazo iba uno a uno entre los presentes. Ella no se conformaba solo con hablarles; también recibía de ellos sus conocimientos.

“Yo aprendo mucho de ellos, porque transmiten ternura, amor y una energía única que a mi también me da el impulso necesario para seguir adelante”, resaltó la dorada paralímpica.

No solo los alumnos estaban atentos. Todos en el plantel (maestros y personal de oficina), fuera del salón, recibían los consejos de los atletas.

El sol de mediodía que ya comenzaba a hacerse notar no impidió que, aunque parados y sin un techo, ese personal permaneciera inmóvil, recibiendo la clave para conseguir una formación integral.

ORGULLO

“El baloncesto y el fútbol son mis deportes favoritos y quiero ir a una competencia a jugar. Agradezco a los atletas por venir. Aprendí mucho de ellos, yo los veo en televisión y me siento orgulloso”, explicó Marío José Perdomo, de 25 años.

Perdomo frotaba sus manos y sus ojos iban de acuerdo al movimiento de los exponentes. Solo una sonrisa afloraba a algunas de las anécdotas contadas.

Con sus compañeros, en voz baja comentaba. “Me siento muy contento con estar aquí. Es un día diferente, porque nos enseñaron que todos podemos hacer deporte”, destacó Perdomo.

Harold Ramos, subsecretario de deportes del Distrito Capital, se mostró optimista de que este tipo de actividades pueda contribuir a la masificación de muchas de las disciplinas.

“Contamos con un grupo de atletas talentosos que están aquí, poniendo su granito de arena para que el deporte llegue aún mejor a las escuelas”, afirmó Ramos.

La inspiración y las ganas de ser cada día mejor se apoderó de este grupo de jóvenes que ahora sueñan y trabajan por llenar de satisfacciones a Venezuela en cualquier escenario deportivo.

Texto/Juan Pablo Azuaje
Foto/Luis Franco