Este lunes|Gobierno sirio demanda a enviado de la ONU respetar plan de paz acordado

El Gobierno de Siria señaló este lunes que el nuevo enviado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) al país, Lakhdar Brahimi, deberá adherirse al plan de paz acordado meses atrás con Kofi Annan, quien renunció a su cargo por falta de apoyo.

La cancillería siria indicó, según la agencia de noticias Sana, que el funcionario de la ONU debe trabajar seriamente para conseguir claros compromisos por parte de los países que brindan apoyo a los grupos terroristas armados que operan en la nación árabe.

El enviado necesita lograr que los gobiernos que respaldan a los irregulares dejen «de intervenir en los asuntos internos de Siria, lo cual está considerado como la piedra angular de nuestro empeño conjunto por detener la violencia, cualquiera sea su fuente».

La cancillería agregó que hablar sobre la existencia de una guerra civil en el país no tiene nada que ver con la realidad, en referencia a los dichos por Brahimi al respecto.

El Gobierno del presidente Bashar Al Assad volvió a denunciar los «crimines de terrorismo perpetrados por grupos takfiríes armados, secundados por países conocidos».

Brahimi, designado el pasado 17 de agosto como enviado, se reúne este lunes con el presidente francés, François Hollande, en París para tratar la crisis siria.

Entrevistado este domingo por la televisión France 24, el diplomático expresó que «muchas personas dicen que hay que evitar la guerra civil en Siria. Yo creo que estamos (en guerra) desde hace un buen tiempo. Lo que necesitamos es poner fin a la guerra civil y esto no va a ser simple».

El funcionario de la ONU expresó que en Siria «no puede evitarse el cambio», por lo cual llamó a «un cambio fundamental, no superficial».

RUSIA CONTRA MEDIDAS UNILATERALES

Por su parte, el ministro ruso del Exterior, Serguei Lavrov, rechazó la aplicación de medidas unilaterales para resolver la crisis siria, en tanto reiteró la necesidad de lograr el fin del conflicto armado de forma negociada.

El diplomático manifestó que «cualquier idea unilateral relacionada con el diferendo sirio no va a funcionar y ello lo demuestra la experiencia de cómo se trataron otros conflictos».

Desde Finlandia, donde se encuentra de visita oficial, Lavrov abogó porque las partes sirias detengan los combates y dejó en claro que «los autores de cualquier otra idea parecen estar dispuestos a cobrar con vidas humanas la puesta en práctica de sus iniciativas».

Rusia junto a China han vetado en el Consejo de Seguridad de la ONU toda posibilidad de una invasión extranjera a Siria, propuesta respaldada por Estados Unidos y sus aliados de Europa y el Golfo Pérsico.

Al mismo tiempo, el presidente estadounidense, Barack Obama, declaró que cualquier movimiento de armas químicas en Siria tendría «enormes consecuencias», por lo cual su Gobierno consideraría una acción militar en el país.

«Hemos dejado muy claro que para nosotros hay algo que sería decisivo, y eso es si vemos que las armas químicas caen en las manos de la gente equivocada. Eso cambiaría significativamente mi evaluación (de la situación)», reconoció el Mandatario.

El titular de la Casa Blanca manifestó que «hasta ahora no hemos ordenado una acción militar en el país, pero hay algo que es crítico para nosotros, y eso es la cuestión de las armas químicas».

Bajo el argumento de la existencia de armas químicas, Estados Unidos invadió Irak en 2003, aunque meses después la administración del entonces presidente George W. Bush explicó que ese tipo de armamento no existía en el país de Medio Oriente.

Pese a haber reconocido esto, Washington mantiene tropas en territorio iraquí y es responsable de la muerte de miles de civiles.

Fuente/AVN