El ministro de Información de Siria, Omran al-Zoubi, enfatizó la disposición de su país de participar sin condiciones en la planeada Conferencia de Ginebra II, pero dejó en claro que el gobierno sirio no negociará con «los terroristas de Takfiris», informó la agencia noticiosa oficial SANA.
Tras enfatizar que «la solución política ha sido la elección original del gobierno sirio desde el inicio del ataque contra Siria», Al-Zoubi dijo que Siria no negociará con los terroristas que participaron en el derramamiento de sangre siria o con sus simpatizantes, sean sirios o no.
Las declaraciones del ministro se producen horas después de que el jefe de la Liga Arabe, Nabil al-Arabi, dijo que la segunda conferencia sobre la paz en Siria será celebrada los días 23 y 24 de noviembre en Ginebra, Suiza.
Al-Arabi dijo que recibió la información de la fecha durante la visita de este lunes del enviado especial conjunto de la Liga Arabe y la ONU para Siria, Lakhdar Brahimi, a la sede la organización panárabe en El Cairo.
Durante su reunión, los dos evaluaron los esfuerzos regionales e internacionales encaminados a la solución política de la crisis siria y discutieron los preparativos en curso para la celebración de la conferencia y los contactos que han establecido con las partes sirias en conflicto, en especial con la coalición opositora nacional.
El Cairo es la primera escala del recorrido regional de Brahimi en preparación de la tan esperada conferencia de paz, la cual ha sido aplazada en múltiples ocasiones.
«Se están realizando los preparativos de esta conferencia», dijo Al-Arabi a los reporteros luego de reunirse con Brahimi.
Sin embargo, el jefe de la Liga Arabe admitió que existen «muchos desafíos que deben ser enfrentados para convocar la conferencia».
Al-Arabi agregó que «Ginebra II» es necesaria para la implementación del documento de la primera conferencia, el cual pide un período de transición y un gobierno provisional integrado por elementos tanto de la administración como de la oposición.
El sábado, Brahimi dijo que no debe hacer condiciones de ninguna parte para asistir a las conversaciones de paz. Sin embargo, durante la conferencia de prensa de hoy, el enviado dijo que «la conferencia no será convocada si no convencemos a la oposición» de participar.
Brahimi espera que la segunda conferencia de paz ponga fin a la crisis sira y conduzca a una etapa de transición con el fin de construir una nueva Siria.
El enviado agregó que la situación está empeorando en Siria debido a que al menos 10.000 personas han muerto y a que la tercera parte de la población siria sufre enfermedades, desplazamiento y arrestos.
«Todas las partes deben darse cuenta de que la situación en Siria es peligrosa para la paz mundial», agregó Brahimi.