Este lunes el director José Antonio Varela comenzará el rodaje|El golpe de Estado de 2002 se revivirá en la gran pantalla

En 2002 José Antonio Varela era el jefe de escritores de una televisora privada y luego de los acontecimientos del 11, 12 y 13 de abril renunció, llegó al “punto de quiebre”, y se aseguró a sí mismo que solo trabajaría en instituciones públicas. El licenciado en Artes mención Cine de la Universidad Central de Venezuela se dedicó a la docencia y unos años después tuvo la suerte de sumarse a la Villa de Cine para hacer unos guiones, después para hacer los largometrajes La clase (2007) y Comando X (2008). Mañana lunes, nuevamente con apoyo de la productora nacional, el director se lanzará a las calles de Caracas, a Turiamo y a La Orchila para dejar constancia en el celuloide de la tragedia del pueblo venezolano hace doce años.

El filme Abril, el nuevo proyecto cinematográfico de Varela, parte de Abril, golpe adentro, el gran reportaje publicado en un libro escrito por Ernesto Villegas, para recrear en la ficción los argumentos de la conspiración para el asalto a la democracia venezolana.

En conversación con el Correo del Orinoco, el director venezolano adelantó que a partir de este mes dedicará nueve semanas al rodaje de su tercer largometraje.

-¿Por qué una película sobre el golpe?

-Creo que el golpe de abril está muy vigente. Las sociedades se organizan con base en un pacto social, normalmente asociado a las constituciones. Bajo estas normas nos aglutinamos todas y todos y logramos convivir en nuestras diferencias. El golpe de 2002 ocurre, a mi juicio, porque se estaba creando un nuevo pacto social, con la Constituyente, con la nueva Constitución, que quizás muchos pensaron que era un saludo a la bandera, pero que tuvo un punto de quiebre unos meses antes, con las leyes habilitantes.

Cree que “cuando se comienza a legislar en el nuevo pacto social, que pretendía hacer una mejor redistribución de la tierra, tener otra lógica de funcionamiento con los derechos ciudadanos, es cuando sectores del poder se empezaron a dar cuenta de que no era un saludo a la bandera, y se iniciaron unas resistencias muy concretas. Y viene otro hito, el cambio de la junta directiva de Pdvsa. Comenzó una transmisión de mando bajo el nuevo pacto social en distintas instancias y sobre esa base hubo mucha resistencia y hubo la planificación de un golpe de Estado”.

“Creo que lamentablemente sigue estando vigente el asunto de cómo nos salimos de aquí, cómo tomamos un atajo a este pacto social”, puntualizó Varela.

-¿Un atajo para una parte de la población?

-Sí, de una parte de la población. En ese sentido siento que está muy vigente, como reflexión colectiva. Porque en verdad el 11 y el 12 de abril es una gran tragedia.

PONER ORDEN

-¿Así se va a contar en la película? ¿Una tragedia?

-Siento que sí, porque fue el asesinato espantoso de 20 personas de una forma maquiavélica, es un crimen no resuelto. No sabemos quién los mató. Desde el inicio de la investigación policial, en la literatura o en el mundo, cuando quieres saber quién mató a alguien lo primero que tienes que saber es a quién benefician las muertes. “Lamentablemente si busca a quién benefician las muertes, probablemente sepas cuáles son los móviles, quién tiene motivos, etc. Por lógica de todo lo que pasó, de la secuencia de los acontecimientos, de lo que pasó a la luz del tiempo, uno intuye quiénes lo hicieron pero no es un crimen resuelto con nombre y apellido, que todos sepamos exactamente qué pasó y eso es una gran lástima, esa es una gran deuda de nuestra sociedad”, agregó.

“Esta película –añadió Varela– lo que intenta es organizar de forma sincrónica (los hechos), que tampoco los tenemos claros”.

-¿Usted hizo el guión solo ?

-No, el proyecto inicialmente del guión lo hicimos José Luis Varela, que es mi hermano, con el que he escrito todos los guiones hasta ahora en 20 años de trabajo y Luis Alberto Lamata. Realmente ese equipo llegó a esta película por la experiencia que tuvimos tanto en Azú, alma de princesa como en Bolívar, el hombre de las dificultades.

-¿Trabajaron en este guión estrictamente con base en el libro de Ernesto Villegas o en otras cosas?

-Basados en el libro de Ernesto Villegas, partimos del libro de Ernesto, pero hicimos el ejercicio de revisar la bibliografía que hay sobre esos días. Fue un trabajo arduo. Estamos combinando esa bibliografía que es muy amplia, cerca de 27o 28 textos que hay publicados sobre esos días, tanto publicaciones nacionales como internacionales. Tuvimos la suerte de consultarlos todos, de cruzar todas las versiones y después de ese cruce de las versiones que tienen soporte bibliográfico lo hicimos con los documentales y lo hemos hecho con algunas entrevistas. Hemos tratado que en esa construcción sincrónica de esos días no haya nada en la película que no esté documentado en algún espacio.

El director aclaró que en el guión no se dedicaron exclusivamente a “ficcionar” aunque desde esta licencia organizaron los hechos “según la lógica dramatúrgica”. Todo lo que está en el libreto “tiene una referencia, con nombres cambiados, con algunos espacios cambiados, porque evidentemente la ficción tiene sus propias reglas y hay que respetar también eso, pero yo puedo referir cualquier evento del guión a una entrevista que hay en algún libro, algún testimonio real de un protagonista de esos días”.

TRENES A MIRAFLORES

-El libro de Ernesto Villegas tiene muchos intertextos, los fragmentos de documentos ¿Va a ser así la película?

-La película tiene un ritmo muy vertiginoso, tiene un ritmo que no es común por lo menos en los trabajos que nosotros hemos hecho. Es un guión que tiene 200 y pico de escenas en 100 minutos, es decir, que las escenas son muy breves porque contaremos muchas cosas, un poco por ese fraccionamiento en el libro. Sin embargo, la película siempre es más pequeña que un libro, porque es una experiencia sensible de 110 minutos, un libro es una experiencia sensible que puede ser de una semana, que puede ser de 8 horas, que puede ser de 20 horas. Una película siempre es como un resumen.

En una de las primeras reuniones, Luis Alberto Lamata “tuvo una imagen que a mí me gustó mucho. Él dijo: imagínense que esta historia son cuatro trenes que van al mismo sitio. Y era un poco para reflejar una película coral, como con varias líneas narrativas que van todas hacia ese punto de las conspiraciones”.

-¿Trenes que van a Miraflores?.

– A Miraflores van, a esos tres días más importantes de los últimos 20 años, desde el punto de vista del cambio de época que significó. Para la izquierda mundial, ese fue el bautismo de la Revolución bolivariana, porque siempre hubo desconfianza a la figura del presidente Hugo Chávez antes de eso, por toda la tradición de militares de derecha en Latinoamérica. Se le abalanzó toda la derecha de un país a tumbarlo y lo más impresionante: que un golpe de Estado con apoyo de los Estados Unidos se revierta en un día, te hace pensar, te hace voltear la mirada e investigar. Ese momento histórico le dio al mundo otra perspectiva de lo que estaba pasando en Venezuela y otra perspectiva del comandante Chávez.

IGUALITO AL ICONO

-¿Quién va a interpretar a Chávez?

Una persona del pueblo venezolano. Fue una de las decisiones más complejas. Porque ¿Quién puede interpretar a Chávez? Y porque Chávez está muy presente. Después de mucho pensar, hicimos un demo, lo vimos, lo discutimos. Hicimos un demo de seis minutos para medir cosas, para entender cosas, para ver cómo era él… para buscar recursos, para lo que se hace un demo. Y al final decidimos, conseguimos una persona que tiene un parecido físico escandaloso con el Presidente, y decidimos más bien usarlo más desde el punto de vista icónico, más que un actor que tiene como grandes participaciones, es una mirada al icono dentro de la película. Haremos algo que no está planteado con los demás personajes –debido a que el parecido es tan fuerte–, vamos a combinar ese tratamiento icónico con el propio Chávez.

– ¿Con material de la época?

-Sí, nos parece que ese material es un documento tan poderoso, por lo menos la cadena de ese día, ese es un documento tan poderoso que no intentamos ficcionar. Es demasiado reciente todo.

-¿Y cómo se llama ese señor? ¿Cómo lo consiguieron?

-Alí Bazan, es un taxista del estado Aragua. Lo conseguimos buscando, con contactos, en las redes sociales, llamadas telefónicas, fuimos a hablar con él, lo trajimos, le hicimos unas fotos, todo un trabajo de búsqueda. En lo particular celebro que sea una persona del pueblo, que sea un taxista del estado Aragua, si algo representa a Chávez es la gente normal y corriente, me parece muy hermoso. Al final la decisión fue prácticamente filosófica. ¿Quién puede interpretar a Chávez? Un venezolano de a pie.

BÚSQUEDA ARTÍSTICA

-De abril se recuerda como una caricatura la huida y las actitudes que tuvieron algunas personas que tomaron el Palacio ¿Esto también se verá en la película?

-No, la película es muy seria y aspira otra cosa, al tratamiento más artístico de las cosas. La gran diferencia entre el cine y la otra mediática es que el cine está en la línea de la obra de arte.

-De esos días de abril se ha hablado muchas veces de un golpe mediático ¿Cómo se abordará eso en la cinta?

-La película está más centrada en las conspiraciones militares, religiosas y económicas. Se toca el tema (mediático) porque es imposible no tocar el tema, pero no profundiza en eso.

“En esta película lo fundamental es esa conspiración militar, lo esencial es la conspiración militar, la económica y la de la iglesia en segundo término, pero sobre todo la conspiración militar y el asunto de los asesinatos”, recalcó José Antonio Varela.

-¿Los asesinatos de Puente Llaguno?

-Puente Llaguno y avenidas Baralt y Urdaneta. Sobre todo eso, como una metáfora de unas personas que conspiraron para romper ese pacto social y de esa conspiración todos somos víctimas. Hay una cosa muy poderosa que uno consigue en los documentos y a mí me conmovió mucho, y es que todas las víctimas fueron a parar al Hospital Vargas, al imaginarse el 12 de abril en la madrugada, donde hay 60 personas en el Hospital Vargas, heridos, otros muriéndose, opositores y defensores del Gobierno.

“Cuando rompemos el pacto social todos somos víctimas. Entonces la película va más por allí”, acotó.

-La película es sobre la conspiración y como al final perdemos todos. En La clase (ambientada en El Caracazo) también queda el sabor de que perdemos todos ¿Es eso lo que busca?

-No sé, La clase tiene un final abierto para que cada quien haga su propia lectura. Esta película que voy a empezar a hacer ahora no va a tener un final abierto, porque no lo tiene, ya pasó, es real, pasó hace tanto tiempo.

-Usted dijo que es un crimen no resuelto.

-Es un crimen no resuelto pero ese pacto social lo hizo Chávez y lo defendió con su vida y lo impuso con ese poderío que él tenía. Si piensas en ese momento que lo zarandearon, que lo llevaron pa’allá, que lo iban a matar, que pa’acá, pa’allá, es una cosa fortísima. Chávez volvió en una actitud de respetemos el pacto social, porque si no respetamos lo que queda es la muerte, lo que queda es la barbarie. Al final este tema es civilización-barbarie, para los que somos de izquierda es socialismo o barbarie, tenemos que aprender a vivir con nuestras diferencias dentro de un marco de paz.

-¿Cuánto tiempo tardaron en hacer el guión?

-Más de un año, entre la investigación, la escritura, reestructura… Año y medio.

-¿Tienen permiso para filmar en Miraflores?

-Sí tenemos. Hemos tratado de respetar los espacios reales.

POR EL TIPO

-¿Cuándo cree que va a estar lista esta película en las pantallas? ¿Cuál es el plan?

-Eso es algo que me excede. Estoy concentrado más en hacerla bien y terminarla bien. Tenemos nueve semanas, empezamos ahorita en junio y vamos a tener nuestra película rodada completa a mediados de agosto. Vamos a empezar a editar en paralelo, es decir, que vamos a tener una versión de la película hacia finales de septiembre.

-¿La película tiene que ver con el contexto electoral de este año? Hay unos tiempos que se relacionan y Ernesto Villegas es candidato.

– No, eso es casualidad. Habíamos planificado hacer esta película el último trimestre del año pasado, pero no tuvimos el flujo económico como para poder empezar en ese momento y estamos empezando ahora. Mi trabajo siempre es corriendo, desde toda la vida, pero creo que a las cosas más bien deberían dársele su tiempo. Hay cosas que necesitan una calidad que no es de la carrera, a la carrera no se hace nada bien. Aunque voy a tener una primera versión hacia finales de septiembre, en tiempo récord, yo reposaría esa película, la reeditaría, la viera y me planteara un estreno el año que viene en las dos fechas que me parecen más razonables, que serían el 13 de abril o el 28 de julio (en el natalicio de Chávez). Porque al final él es el tipo, se fajó desde la resistencia pasiva y la dignidad.

CONSENSO ENTRE BANDOS

El cineasta José Antonio Varela celebra que actualmente se califique como golpe de Estado contra el entonces presidente Hugo Chávez los hechos que se vivieron el 11 y el 12 de abril de 2002.

“En este momento, 12 años después, nadie se atreve a decir lo contrario, hasta en los libros de las personas de oposición. Cualquier persona que se siente a abordar el tema con cierta seriedad parte de la premisa del golpe de Estado, puede tener toda la carga a favor o toda la carga en contra, pero ya en este punto hay como un consenso” en que no fue un “vacío de poder”, afirmó.

EL ELENCO

En la película Abril, que dirigirá desde mañana lunes José Antonio Varela, actuarán Aura Rivas, Aníbal Grunn, Francisco Denis, Costas Palamides, Adolfo Nittoli, Alberto Alifa, Alberto Rowinski, Antonio Cuevas, Alejandra Rojas, Alejandro Palacios, Arnaldo Mendoza y Carlos Arrollo.

T/ Várvara Rangel Hill
F/ Héctor Rattia
Caracas

Atencion :Camaradas cineasta Jose A. Varela, espero esten bien todos en especial su grupo familiar. Concerniente a la pelicula abril golpe adentro segun la nota publicada por este medio, seria buenisimo que observara el documental «un golpe y una carta» del soldado que participo en el momento del traslado del comadante supremo a la Orchila, que gracias a Dios fue escuchado por los paracaidista y luego fue rescatado vivo y salvo. Que buenos seria la pelicula con informaciones precisa y reales de gente que participaron sin cambio a nada y menos con protagonismo. Venceremos…