Gonzalo Gómez, miembro de la corriente revolucionaria Marea Socialista del PSUV, opinó que los cambios en el gabinete ministerial deben analizarse para determinar “a qué políticas van vinculados”.
Explicó que el “cambio de personas por sí mismo no dice gran cosa”.
Comentó que los anuncios del presidente Nicolás Maduro están relacionados con el plan de la patria: “Pero el problema es que los enunciados tienen que estar en correspondencia con las medidas concretas y específicas”.
Como ejemplo, refirió que si se plantea un enunciado relacionado con el impulso productivo de orientación socialista, “pero después las medidas que se toman” responden “al chantaje de la burguesía y que obedecen a la presión de los sectores capitalistas, entonces no estás cumpliendo con el programa que debes aplicar”.
Comentó que el pueblo bolivariano quiere “la aplicación real del plan de la patria y que ese sacudón se convierta en un golpe de timón”.
Gómez indicó que Marea Socialista ha propuesto cinco medidas. La primera se refiere a la recuperación del aparato productivo para “lograr el desarrollo basado en la propiedad social”.
En tal sentido, manifestó que el Gobierno no debe reconocer a los empresarios las deudas “en dólares que están reclamando, sin antes efectuar una revisión a fondo para preservar esos recursos”.
En este sentido señaló que es necesario quebrar “la cadena de corrupción” que a su juicio “está incrustada en el aparato del Estado; hay una burocracia que se ha corrompido y que ha acumulado capital para cambiar de condición social, separándose del pueblo que le da la base de sustentación a esta revolución bolivariana”.
Esta corriente también ha planteado la reforma tributaria para que los sectores económicos “carguen con el peso de los impuestos”.
Asimismo, proponen que el comercio exterior esté en manos del Estado para evitar “que los dólares vayan a parar a los sectores burgueses”.
Calificó como un fraude y un desfalco a la nación la obtención de divisas por parte de empresas privadas para la importación de bienes, aunque las compras en el exterior nunca se concretaron. Esta situación, en su opinión, ha generado el desabastecimiento de productos.
Según Gómez, el contrabando de mercancía guarda relación con la importación, cuando se aprovecha el diferencial cambiario, “y con la corrupción”.