Los partidos del Gran Polo Patriótico rechazaron este miércoles las acciones de violencia organizadas por la ultraderecha en el país, que han dejado ocho fallecidos y 61 lesionados, tras la incitación del ex candidato a la presidencia Henrique Capriles, quien fue derrotado nuevamente en sus aspiraciones este domingo 14 de abril.
El secretario general del Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), Wilmer Nolasco, dijo que Capriles Radonski es irresponsable al decir que hubo fraude en las elecciones presidenciales del domingo sin presentar pruebas.
«No es responsable exigir derecho llamando a concentraciones y a protestas. Exigimos a Capriles que respete las reglas de juego democrático», expresó este miércoles en rueda de prensa.
De continuar estas acciones violentas por parte de la ultraderecha, manifestó que saldrán a las calles a defender, de forma pacífica, los logros de la Revolución y la gran victoria del 14 de abril.
«Tendremos nuestro pueblo en la calle exigiendo respeto y paz sin agredir a nadie. El pueblo no puede permitir que Capriles y su capricho acaben con nuestra tranquilidad», dijo.
Nolasco instó al candidato derrotado a recurrir a los entes gubernamentales para hacer su denuncia electoral, tal y como lo establece la ley, «sin necesidad de convocar a una marcha».
«Eso no lo vas hacer (Capriles) porque no tienes argumentos y las que ha presentado son irrelevantes. Está solamente en su mente y en el guión que le dieron del imperio», agregó el secretario general del MEP, quien además manifestó que actualmente existe, por parte de la derecha, un guión y una intensión de crear zozobra y miedo en el pueblo.
«Este pueblo no acepta que alteren su estabilidad emocional y la tranquilidad que le dio el líder supremo, Hugo Chávez, y que se lo garantiza hoy el presidente socialista electo, Nicolás Maduro», expresó.
En rueda de prensa, Nolasco declaró que la denuncia de Capriles de que en «564 centros de votación se abusó del voto asistido» se debió haber impugnado en el mismo momento.
«Está tomando hechos falsos para exacerbar los ánimos de las personas que creyeron en él, para crear terror en el pueblo pero no se lo vamos a permitir. El pueblo no va a permitir la historia del 11 de abril de 2002, cuando se asesinaron ciudadanos», apuntó.