El embajador de la República Bolivariana de Venezuela, Javier Arrúe, destacó hoy que el 19 de abril de 1810 se dio un grito independentista que marcó la historia del país, pero recordó que este “no fue el primero”.
Arrúe, quien emitió sus declaraciones durante una ofrenda floral al Libertador Simón Bolívar, explicó que 200 años después de aquel grito, los pueblos nuestroamericanos tratan de conquistar su verdadera independencia.
“Han pasado 200 años de aquel grito y todavía no nos hemos independizado”, declaró Arrúe. “Ahora el grito no es por la libertad, sino por la integración. El grito de 1810 nos debe inspirar para lograr la integración de nuestros pueblos”, apuntó.
En la ofrenda floral, que se desarrolló en la plaza de la Independencia de la capital paraguaya, participaron niños y niñas de la Unidad Educativa República Bolivariana de Venezuela, además del personal militar y diplomático venezolano y de países de la región.
Esta actividad formó parte de una serie de eventos que la Embajada venezolana viene desarrollando en Asunción, como parte del proceso de integración de los pueblos. Recientemente se rememoró en la Universidad Nacional de Asunción la recuperación popular democrática del 13 de abril de 2002.
Paralelamente se organizaron foros y conversatorios sobre las históricas luchas del 27 y 28 de febrero. También la Embajada destacó el día de la rebelión cívico-militar del 4 de febrero de 1992.