Los cadáveres de tres militares españoles desaparecidos desde el jueves de la semana pasada cuando el helicóptero en que viajaban cayó al mar fueron hallados este jueves en la cabina del aparato.
La aeronave del tipo Superpuma del Servicio de Búsqueda y Rescate del Ejército del Aire cayó al Atlántico cuando regresaba a su base en Gran Canaria tras realizar ejercicios de entrenamiento en Senegal y una escala en Mauritania.
Las malas condiciones del tiempo y la profundidad a la que hundió el aparato, a más de 40 metros, dificultaron el rescate de los cuerpos del capitán José Morales, el teniente Saúl López y el sargento Jhonander Ojeda.
La falsa información inicial de que los tres militares habían sido rescatados por un pesquero, luego desmentida, añadieron un dramatismo adicional a la tragedia.
Esta confusión llevó a que en las valoraciones iniciales el Ministerio de Defensa español informó que investigaban todas las hipótesis, incluido el secuestro, aunque no era considerada la más plausible.
El ministro de Defensa Pedro Morenés confirmó a los familiares de las víctimas que buzos de la Armada localizaron esta tarde dentro de la cabina del aparato los cadáveres de los tres tripulantes.