“Es algo realmente bueno, un regalo de Dios», ha puntualizado el Sumo Pontífice este jueves, en un mensaje dedicado a los pros y contras de la era digital. Ha insistido en que las tecnologías de la comunicación en línea tienen un potencial para convertirse en «un bálsamo que alivia el dolor y un buen vino que alegra el corazón».
El papa apreció Internet por las «inmensas posibilidades» que da para que la gente de diferentes culturas y religiones pueda interactuar y destacó la importancia de un diálogo, cuando los interlocutores respetan las ideas y principios de otros.
Al mismo tiempo, advirtió contra los peligros de Internet, sobre todo contra la obsesión por las comunicaciones en línea. «El deseo de estar conectados puede producir el que nos quedemos aislados de nuestros vecinos, de la gente más cercana para nosotros», insistió.
Cabe recordar que en varias ocasiones el papa Francisco ya destacó la importancia de Internet en la vida de la sociedad moderna y abogó por su uso por la Iglesia Católica. Insiste en que los creyentes deben estar presentes en la Red para llevar la fe a los demás.
«La presencia de la Iglesia en la Red no es inútil. Al contrario, es indispensable estar presentes con un estilo evangélico», dijo el Sumo Pontífice en diciembre, al recibir en audiencia a los participantes de una reunión del Consejo Pontifical para los Laicos.