Aseguró Wuikelman Ángel Paredes|Inces quiere duplicar en 2017 participantes en el Programa Nacional de Aprendices

“El Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces) centra su trabajo en los lugares donde estén los proyectos mayores en economía”, recalcó Wuikelman Ángel Paredes, presidente de este instituto que, junto al Ministerio para el Proceso Social del Trabajo, se centran en la formación de trabajadores y trabajadoras de nuestra nación.

Este abogado y su equipo de trabajo actualizan continuamente la formación de trabajadores y trabajadoras “de manera recurrente, especialmente la industria peotrolera, pero también estamos centrados en lo sectores hidroléctrico, telecomunicaciones y otros, garantizando que el conocimiento llegue a su gente”.

De ahí que muchos quienes tienen veinte o más años trabajando en un área “aporten sus saberes a partir de la metodología colectiva, que garanticen que esos conocimientos no se vayan a perder porque ese compañero o compañera se jubile. Hay que hacer la transferencia de dichos saberes para la juventud”.

Ángel considera que el actual sector laboral está compuesto primordialmente por jóvenes: “Es un bono demográfico este sector de la juventud que comprende entre catorce y treinta años de edad. Es un desafío incorporar a las jóvenes de las comunidades que están cerca de los 142 centros de formación nuestros situados en el territorio nacional, que esos centros tengan conexión con las respectivas entidades de trabajo y sus encandenamientos productivos. Que una vez que se forme en el Inces se integre al mundo de empresas, públicas o privadas”.

Considera que será muy existoso el denominado Programa Nacional de Aprendices, que atiende a más de 45 mil personas: “La idea es duplicar esta cantidad, siempre y cuando las empresas cumplan con el tributo legal, que es el utilizado por Inces. Debemos recordar que no funcionamos con presupuesto ordinario del Ejecutivo Nacional”.

Se refiere al 2% que debe cancelar trimestralmente una empresa que tenga más de cinco trabajadores. Se le suma 0,5% de las utilidades y aguinaldos, o ganancias al año retenidas al trabajador directamente. Este año ya superaron los 850 mil formados, “pero el entrante la meta es llegar a los 850 mil, sobre todo para que trabajen en nuestras empresas. La idea es que en cada industria esté presente en el Inces”.

PROGRAMAR

El directivo aprovechó para resaltar la importancia de la gran programación para distintos entes y personas que tiene el Inces. Estos incluyen el programa de formación productiva, el Luisa Cáceres de Arismendi, el de formación de formativos, Inces militar, el nacional de aprendizaje (14-18 años), para la juventud (14-30 años), de formación a distancia, becas de trabajo, de inclusión productiva y prosecución de estudios.

En todos estos programas y gracias a la tributación se ha podido concretar la formación, la ampliación y diversificación de la oferta educativa en función de los quince motores productivos.

Esto implica además la operatividad óptima en cada uno de los 142 centros de formación situados en el territorio nacional. También cuentan con 640 aulas, 410 talleres y 244 laboratorios recuperados.

Señaló que cuentan con más de seis mil formadores a nivel nacional, mientras tienen una plantilla administrativa que supera los siete mil: “De los formadores, algunos trabajan por horas y otros tiempo completo. Claro está, ellos continuamente están perfeccionado sus conocimientos, especializándose con mucha innovación e investigación”.

Ángel destacó que hoy en día siguen existiendo las aulas, pero ahora los formadores están o se acercan a los centros de trabajo en alianza con el Ministerio para el Proceso Social del Trabajo: “Se analizan los nudos críticos en las unidades de trabajo y nosotros como institución atendemos la formación. Ya no solo es como antes que las aulas del Inces eran los centros de formación, sino que impulsamos que la formación se de también en esas entidades de trabajo, porque allí es que están los problemas prácticos, los trabajadores y los saberes. Es asumir la enseñanza en los espacios naturales de esos trabajadores, que puede ser una fábrica, el campo”.

Recordó que esa formación de la masa trabajadora es permanente lo que implica la revisión de programas y actualización de saberes. También resaltó que esta formación se centra en los quince motores de la Agenda Económica, priorizados el agroalimentario (cultivos de diversos productos agrarios, procesamiento y conservación de alimentos, jardinería y otros) y farmacéutico.

También son apoyados el de construcción (impermeabilización, instalación de hidrocarburos, auxiliar de topografía, carpintería, electricista, etc), turismo (inglés en diversos niveles, pastelero, repostería, cocina de diversos países y varios más), banca pública y privada (contabilidad en diferentes niveles, auxiliar de auditorías, valoración aduanera, etc.).

Además no se descuida la confección textil (de prendas de todo tipo, elaboración de bolsos y morrales en distintos materiales, corte y costura para vestimenta, etc.), minería (perforación para voladuras en minas, alfarero artesanal, joyería artensanal, orfebería artística, etc.), industrial (aire acondicionado, herrería, encuadernación, ebanistería, soldadura universal, soldaduras, torneado, refrigeración doméstica, etc.).

Aprovechó Ángel para señalar la necesidad de una mayor seguridad en los centros que hay en Venezuela: “Lamentablemente la delincuencia nos tiene azotados. Un ejemplo es que se roban equipos completos o partes de máquinas cuyos repuestos son difíciles de conseguir debido a que son de alta tecnología”.

CIFRA SUPERADA

El Inces presentó recientemente el balance de gestión del mes de noviembre, que superó en 103% la meta establecida en formación al registrar 513.259 participantes durante este año, con el aporte del plan remate que consistió en cursos cortos de 4 a 40 horas de duración y la certificación de saberes.

Las cifras que superan lo propuesto por las autoridades del Inces, de llegar a 500 mil participantes este año, vienen dadas por las acciones tomadas en los últimos meses hacia el abordaje de 340 entidades de trabajo, que ubicaron a 52.068 participantes en empresas públicas y privadas, socializando sus conocimientos, destacó el informe, según nota de prensa de esta institución.

Un total de siete programas desarrolló el instituto para lograr la meta del año con la formación productiva que incluyó a 349.813 participantes; Luisa Cáceres de Arismendi, que permitió la educación de 18.392 venezolanos en los centros penitenciarios; Inces Militar con 31.514 participantes; 45.581 aprendices del Programa Nacional de Aprendices; 31.244 en unidades educativas y 23.813 acreditados por el programa de conocimientos por experiencia en ejercicio.

La formación del Inces se ha dado principalmente en los CFS con 155.524 participantes, en las comunidades (99.514 personas) y en las entidades de trabajo, pero además incluyen actividades formativas en instalaciones militares, nuevos urbanismos, Misiones y Grandes Misiones, unidades educativas, entre otros ambientes.

La prioridad para el Inces durante este año ha sido la activación de algunos de los motores productivos como el industrial que ha formado 99.245 venezolanos, el agroalimentario (87.317) y el nuevo modelo de gestión administrativa con 83.526 participantes. Igualmente, se reactivaron cursos en el motor farmacéutico que formó a 859 participantes e hidrocarburos con 85 estudiantes para el sector petrolero del país.

T/ Eduardo Chapellín
F/ Luis Franco