Fue posible constatar, a través de las páginas web de Cinex y Cines Unidos, que la película “Bolívar, el Hombre de las Dificultades”, no está siendo proyectada en su fin de semana de inicio en ninguna de las 11 salas del mayor centro comercial de Caracas, pertenecientes a los dos grandes circuitos de cine comercial: Cines Unidos y Cinex. En cambio, la película de animación Turbo, distribuida por 20th Century Fox, se proyecta en cuatro salas, y Los Pitufos 2, distribuida por Columbia Pictures, en tres salas más.
Turbo trata sobre un caracol que sueña con ser el mejor corredor del mundo. Los Pitufos 2 es una secuela de la película de 2011, basada en el comic del artista belga Peyo y en los dibujos animados de Hanna Barbera.
La empresa Cinex, que posee seis salas en dicho centro comercial, no está proyectando allí ninguna película venezolana en este momento. Cines Unidos tiene las otras cinco salas del Sambil, pero sólo una de ellas proyectó una película parcialmente producida en Venezuela: Esclavo de Dios, que levantó controversias por su forma de presentar al pueblo palestino, pero que ya lleva 8 semanas en cartelera a pesar de denuncias de boicot.
En Caracas, Cinex proyectó a “Bolívar” este domingo apenas en tres salas: Concresa, El Recreo y Tolón, mientras que Cines Unidos lo hizo en cinco: Millenium, Líder, El Marqués, Galerías Paraíso y MetroCenter. Parecen bastantes, pero Cines Unidos le dedicó ocho salas a Los Pitufos 2, Mi Villano Favorito 2 y Turbo, y seis salas a Guerra Mundial Z y Ladrona de Identidades. Lamata lamentó la desinformación de las carteleras de cine, pues la versión impresa aseguraba Bolívar estaría en cinco salas capitalinas de Cinex.
“Es lógico que el espectador venezolano responda primero a otro tipo de filmes, pero creo que, en el arranque, merece la misma oportunidad”, dijo Lamata al diario El Universal. “Yo aspiro para el cine nacional que, cuantitativamente y cualitativamente, me refiero a la calidad y ubicación de salas, tengamos un trato justo”.
Con la película Azú, también realizada por Lamata, pasó algo parecido:”El caso de Azú era tremendo: uno era el horario en los periódicos; otro, en la red; y cuando llegabas al cine resulta que ya había empezado”, agregó. Al final, con Azú, le asignaron cuatro salas adicionales. En 2010, se vivieron circunstancias similares con la película Taita Boves, que fue estrenada en apenas tres salas capitalinas. ”Trato de pensar a largo plazo. No voy a renunciar a que alguna vez pueda ver una película mía en los cines que siempre están negados”, concluyó Lamata.
Película dañada y malos tratos en el C.C. Líder
Numerosos mensajes en la red social Twitter denunciaban, el viernes en la noche, problemas técnicos durante el estreno de “Bolívar…” en una de las salas de Cines Unidos en el Centro Comercial Líder. El periodista Simón Herrera escribió en el diario Ciudad Ccs su experiencia.
“Como siempre, con mucho orgullo de ver la sala 3 llena en su totalidad, señal clara de la alta aceptación que está teniendo el cine venezolano. La emoción no duraría mucho: a los 10 minutos de haber empezado la proyección toda la sala se apagó y nos dejaron en mutis total. Sin información, sin respuestas”.
Continuó Herrera: “En algún momento de la espera pasó un empleado por las escaleras centrales de la sala viéndonos y riéndose, quién sabe por qué, pero causó malestar. La gente empezó a salir a pedir respuesta y nadie aparecía. Finalmente, al cabo de unos 45 minutos llegaron unos empleados alegando que hubo problemas técnicos y que ‘dentro de cinco minutos’ volveríamos a ver la proyección. Luego de esos cinco minutos aparecieron de nuevo y nos dijeron que 10 minutos.
Al cabo de esos 10 minutos, vimos a un señor de nombre José Manuel Velásquez, subgerente de la sala, explicando que el proyector se había dañado y no podían volver a ponerla. ‘Tienen que desalojar la sala y su dinero será reintegrado’, fue lo que terminó de indignar a los presentes. Ya eran casi las 11 de la noche, cuando la función empezaba a las 9:20 pm”.
“Dada la hora, les propusimos que nos cambiaran de sala, pero nos dijeron que era ‘imposible’”, señaló el comunicador social en Ciudad Ccs. “Valga acotar que la reacción del subgerente, los empleados de seguridad y otros de la empresa, fue grosera, cínica y hasta sarcástica.
Escuchábamos cosas como ‘les van a devolver su dinero, tenemos Patria’ o ‘pueden venir mañana con esos mismos tiques, pero mañana, no cuando a ustedes les dé la gana’. En fin, las presiones con denunciar ante el Indepabis y luego la de dos periodistas, entre ellos mi persona, de llamar a la prensa fueron haciendo mella. Pasadas las 11 de la noche nos cambiaron a la sala 5, a estas alturas casi la mitad de la sala se había retirado. Era la alternativa que habíamos propuesto desde un principio. ‘Estas cosas no pasan con Capitán América, con Superman ni con el Hombre Araña’, decía uno de los asistentes. ‘Le siguen teniendo miedo a Bolívar’, expresaba otro.
Pudimos ver la película ya a medianoche, con la amarga corazonada de que esto no fue accidente, sino una más de esas dificultades que sigue enfrentando el Libertador”.
Alternativas
El gobierno bolivariano provee de opciones para ver la película. Desde el 16 y hasta el 29 de agosto la película se proyectará en la Cinemateca Nacional del Museo de Bellas Artes, ubicada en la plaza Los Museos, a las 6:30 pm, con una entrada de Bs. 10. Igualmente, está siendo proyectada en las cinematecas de Macuto, San Carlos, San Felipe y San Fernando. También se prometen funciones populares en diferentes ciudades.
¿Podrá superar Bolívar esta nueva dificultad con que se tropieza, esta vez proveniente del cine hollywoodense y sus franquicias venezolanas? Estamos seguros de que sí.