El Ayuntamiento de Hakodate, en la norteña prefectura de Hokkaido, prometió este sábado demandar al Estado japonés para intentar detener la construcción de una planta nuclear en Oma bajo el argumento de que podría causar daños en caso de accidente.
El alcalde de Hakodate, Toshiki Kudo, especificó a la agencia de noticias Kyodo, que la administración estudia acudir al Tribunal de Distrito de Tokio para exigir la revocación de una autorización concedida en 2008 a la empresa Electric Power Development para levantar una central en la ciudad costera de Oma, enclavada en el extremo norte de Aomori en Honshu.
Kudo insistió en que Hakodate sufriría graves consecuencias si en algún momento acontece un devastador accidente nuclear.
Es irracional que la planta se construya sin el consentimiento del pueblo y el Ayuntamiento de Hakodate si se tiene en cuenta su proximidad geográfica y el antecedente del desastre nuclear de Fukushima en 2011, el peor desde la tragedia de Chernóbil en 1986.
A raíz de lo acontecido en Fukushima, la seguridad de las instalaciones atómicas es objeto de debate en todo el mundo y especialmente en Japón, donde todavía existen decenas de miles de personas desplazadas de la zona de exclusión en torno a la central.
De acuerdo con las declaraciones del alcalde, la demanda repasará ante los tribunales la necesidad de proteger a sus residentes, ya que la ciudad se encuentra dentro del radio de 30 kilómetros de la central designado como zona especial de protección ante emergencias nucleares.
Luego de comenzar la edificación de la planta de Oma en mayo de 2008, los trabajos fueron suspendidos en 2011 tras el desastre nuclear de Fukushima, pero las labores se reanudaron en octubre de 2012.