La ministra del Poder Popular para los Servicios Penitenciarios, Iris Varela, denunció este sábado que más de 200 adolescentes, que permanecen recluidos en el Servicio Autónomo sin Personalidad Jurídica para la Protección Integral de la Niñez y de la Adolescencia del estado Miranda (Sepinami), están viviendo condiciones «infrahumanas», de hacinamiento y sufren violaciones de sus derechos humanos.
Desde el Centro penitenciario de Yare I, la funcionaria señaló que el Sepinami, dependiente de la gobernación de Miranda, a cargo de Henrique Capriles Radonski, «se parece al antiguo retén de La Planta”.
Contrastó que en los centros de detención que maneja su despacho hay absoluto control, así como atención a los adolescentes con condiciones dignas, apoyo familiar y trabajo con la comunidad.
“No hay problemas allí”, garantizó, al tiempo que exhortó a los medios de comunicación a que coordinen con la viceministra Anahí Arimsendi, autoridades de la Lopna y de la Defensoría del Pueblo, una visita de inspección a todos los centros de reclusión de adolescentes en conflicto y le exijan al gobernador opositor tomar las medidas de atención pertinentes.
“Nosotros no estamos aquí para hacerle el trabajo a ese señor, lo primero que tiene que hacer es cumplir con sus funciones como gobernador, pues se trata de seres humanos”, puntualizó.