La rusa hará su última presentación en salto con pértiga antes de retirarse|Isinbáyeva quiere despedirse por todo lo alto en el Mundial de Atletismo

La rusa Yelena Isinbáyeva es la atleta más carismática en la actualidad. Solo es comparada con la gracia que tenía la estadounidense Florence Griffith en la década de los 80.

Isinbáyeva ejecutará hoy (2:05 am hora venezolana) en el estadio Luzhnikí de Moscú, su último salto antes de dejar la pértiga que durante 15 años ha sido como la prolongación de sus brazos.

La prueba de hoy será su última competición y por primera vez Isinbáyeva no cargará con la pesada responsabilidad de ser la favorita. El último de sus dos títulos mundiales lo logró hace seis años.

En la competencia parten como favoritas la cubana Yarisley Silva y la estadounidense Jennifer Suhr, quienes el año pasado en los Juegos de Londres igualaron en marca (4,75 metros), aunque el título olímpico fue para la norteamericana por mejor concurso.

Nunca más tendrán los aficionados la oportunidad de ver en acción a Isinbáyeva, que en sus mejores tiempos congregaba multitudes convocadas al reclamo, no solo de la victoria, sino de un récord mundial casi seguro.

HISTORIA

A lo largo de su carrera deportiva la atleta de Volgogrado, Rusia, ha conseguido 28 títulos. No podrá, por tanto, ver realizado su sueño de alcanzar los 35, récord en manos del ucraniano Sergey Bubka, actual plusmarquista masculino de pértiga, reconvertido en vicepresidente de la IAAF y aspirante a la presidencia del COI.

La comparecencia de Isinbáyeva servirá para comprobar si los Mundiales de Moscú son capaces de remontar el vuelo después de tres días de graderíos despoblados en el estadio Luzhnikí. Si los aficionados no responden a la llamada de «La Zarina», el problema no tendrá remedio.

A sus 31 años, Isinbáyeva busca una despedida con la medalla de oro, o al menos, abandonar la pista con una actuación digna, acorde con su elevado rango, después de sus fracasos en los dos últimos Mundiales. En Daegu 2011, fue sexta, mientras que en Berlín 2009 no fue capaz de hacer un solo salto válido en la final.

Si un tiempo disfrutó de un margen de seguridad gigantesco con respecto a sus rivales, hoy media docena la han alcanzado y le disputan, muchas veces con éxito, la victoria con deportiva.

Texto/EFE
Foto/AFP