El Gobierno de Israel confirmó este lunes la decisión de crear una universidad dentro de una de las comunidades judías establecidas en Cisjordania y que son criticadas por invadir el terreno palestino.
En un comunicado, el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, indicó que la constitución de la institución educativa partió de una decisión del gobierno, que consiste en transformar en universidad un colegio de enseñanza superior en la colonia de Ariel en Cisjordania.
«El ministro de Defensa Ehud Barak ordenó esta noche al comandante de la región militar centro (que cubre Cisjordania), el general Nitzan Allon, proclamar que el colegio universitario de Ariel es una universidad», indicó el texto.
La comunicación oficial también resalta que “esta decisión sigue a la tomada en ese sentido por el gobierno y a las recomendaciones de consejero jurídico del gobierno publicadas hoy (lunes) a ese respecto».
En sus recomendaciones publicadas el lunes por la noche, el consejero jurídico del gobierno, Yehuda Weinstein, reconoció lo supuestamente “bien fundado” de la decisión del gobierno, que siguió a la opinión favorable de los miembros del Consejo para le educación superior en Judea-Samaria (Cisjordania), instancia allegada a los colonos.
La transformación de este colegio, ya había sido anunciada por el Gobierno de Benjamin Netanyahu el pasado 9 de septiembre; no obstante, para concretarla y hacer efectiva la transformación, debía ser avalada por el ministro de Defensa, a cargo de los Territorios ocupados.
Autoridades divididas
La decisión de “ascender” el nivel educativo del colegio Ariel fue precedida por una polémica que desde julio ha estado encendida entre miembros de la ultraderecha religiosa-nacionalista y la comunidad académica.
Para el gremio académico, la instauración de la universidad es una estrategia política y contraria a los intereses educativos que dañará y rebajará el nivel de las otras ocho universidades de Israel.
Sin embargo, varios ministros se habían manifestado a favor de la conversión del centro en una universidad, entre ellos los titulares de Finanzas, Yuval Steinitz, que prometió financiación especial, y el de Educación, Gideon Saar.
El Comité de Planificación y Presupuestos del Consejo de Educación Superior de Israel fue uno de los que advirtió contra la medida y recomendado mantener el estatus temporal de “centro académico”, que recibió en 2007, y examinar de nuevo el asunto el próximo año.
El comité de rectores universitarios difundió en julio un comunicado en el que señalaba que la creación de una nueva e innecesaria universidad supondría un “golpe mortal” al sistema de educación superior.