Según Jesús Baceta, filósofo y profesor titular de la Universidad Central de Venezuela, “las opciones de subvención en el área cultural que particularmente tiene el Estado venezolano permiten de alguna manera, desde el punto de vista progresista, que el individuo se desarrolle como persona en su condición humana”.
El experto admitió que no tiene las herramientas para clasificar al Estado venezolano dentro de un sistema ideológico específico; sin embargo, consideró que, “sin duda alguna hay progresistas en Venezuela como los hay en otros tipos de estados, y esto favorecer la cultura”.
LA CULTURA Y LAS IDEOLOGÍAS
Como parte de su disertación en el Primer encuentro El libro y la Lectura y la escritura como constructores de identidad patrimonial, realizado en la sala Juan Bautista Plaza, en el Foro Libertador, el filosofó habló sobre los tipos de cultura y su características en gobiernos de corte totalitarista, neoliberal o progresista.
A decir de Baceta, en los gobiernos neoliberales la cultura es un negocio, ya que, más que involucrarse directamente en su gestión, sus líderes prefirieren que la cultura se rija por la fluctuación del mercado. “Todo bien cultural tiene un precio”, precisó el experto.
En el caso del totalitarista, este intentará de alguna manera dominar la cultura y presentarla en términos que favorezca y divulgue su ideología; en cambio, explicó que en el caso los sistemas progresistas estos apoyan irrestrictamente el desarrollo cultural.
EL IMPULSO DE LA CULTURA POPULAR
Para Baceta, los progresistas deben ver por la cultura popular y hacer que esta se imponga sobre lo comercial; aseguró que la ingenuidad y la su pureza de lo popular “es lo que inspira el desarrollo de la auténtica cultura; aquella relacionada con las humanidades y con las profesiones liberales como la medicina, el derecho, ingeniería”.
“El progresismo desea que de alguna manera haya mejores escritores, mejores pintores, escultores y además desarrolla la cultura popular en todos sus sentidos como inspiración de la cultura tradicional especializada”, alegó.
LA PROPAGANDA
Baceta indicó que en un sistema progresista la propaganda tiene cabida como parte del aparataje cultural. En este sentido, Baceta estimó que “la promoción de la cultura es importante dentro de cualquier ideología, debido a la necesidad que tienen los Gobiernos de promover sus modelos.
En el caso venezolano, dijo que observa características progresistas pero que adquieren particularidades totalitaristas “bajo situaciones de contingencias nacional”. “Eso depende de los actores”, reiteró, “hay actores progresistas tanto en el socialismos como en el capitalismo, y en Venezuela hay de los dos tipos. Es una cuestión de protagonismo y de momento histórico”.