El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) de Honduras, Ramón Custodio, confirmó que más de 51 mil personas murieron violentamente en este país desde el 2000 hasta agosto de 2012 y calificó esa situación de «epidemia».
Aseguró que la criminalidad ha experimentado en los últimos años un alarmante incremento y el pueblo hondureño no sólo tiene que enfrentar en la actualidad la crisis económica sino también una serio problema de inseguridad pública por las elevadas tasas de violencia.
Al fundamentar su aseveración recordó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que el estándar normal son nueve homicidios por cada 100 mil habitantes y califica la situación de «epidemia» cuando la tasa es de 10 hacia arriba.
En el 2011, unos 250, de los 298 municipios con que cuenta el país, registraron tasas de homicidios por encima de la mundial y en los 31 meses de gestión del actual gobierno presidido por Porfirio Lobo se registró la muerte violenta de al menos 17 mil 500 personas, apuntó.
Recordó que sólo el pasado año el número de homicidios ascendió a siete mil 104; es decir, una víctima cada 74 minutos, y llamó a la prensa a no destacar esos crímenes convirtiéndolos en apología del delito, porque precisamente los autores de la violencia buscan atemorizar al pueblo.
Previamente, el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional de Honduras consideró que sin existir guerra esta nación fue en 2011 la más violenta del mundo con 86,5 homicidios por cada 100 mil habitantes.
Pero un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) difundido simultáneamente en Washington calificó de mucho más dramática la situación creada por la violencia en Honduras. El reporte del organismo regional señaló que la tasa de muertes violentas en el país subió a 91,6 por cada 100 mil habitantes y definió a Honduras como la nación más violenta de Latinoamérica y el Caribe.
Por su parte, el ministro de Seguridad de Honduras, Pompeyo Bonilla, contradijo estas cifras y afirmó que la tasa de homicidios en el país es de apenas 80.8 por cada 100 mil habitantes.
«En realidad hemos logrado bajar y estamos en este momento en 80.8 homicidios por cada 100 mil habitantes, ahora vamos en proceso de descenso», explicó Bonilla a la prensa local.
La rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, también aseguró que las tasas han disminuido de 86,6 en 2011 a 86,4 en lo que va de este año.
Sin embargo, denunció que la Policía Nacional de Honduras está ocultando información y se obstaculizan las fuentes abiertas que estuvieron disponibles en los últimos seis años.
Una delegación estadounidense de defensores de derechos humanos llamó en las últimas horas a Washington a suspender la ayuda militar y policial a Honduras porque sólo ha generado resultados negativos.
Preocupados por los asesinatos y desalojos de campesinos, los representantes de la organización «Voz de los de Abajo de Chicago», recorrieron áreas del conflictivo Valle del Aguán y fueron amenazados de muerte por guardias de los terratenientes de la zona.