La ONG advirtió sobre la precaria situación sanitaria en el país caribeño|Médicos del Mundo piden desmilitarizar ayuda humanitaria en Haití

La mitad de la población de Puerto Príncipe vive hacinada

El brote de cólera que padece Haití, y que ya fue declarado epidemia por haberse extendido por una amplia extensión territorial, ha infectado hasta el momento a 3.342 personas y causó la muerte de otras 259, según cifras de la Organización Panamericana de Salud (OPS).

El cólera es una enfermedad aguda, diarreica, provocada por la bacteria Vibrio cholerae, la cual se manifiesta como una infección intestinal y puede ser mortal si no es tratada a tiempo.

La enfermedad puede diseminarse rápidamente en áreas con tratamientos inadecuados de agua potable y aguas residuales, aunque la bacteria del cólera también puede vivir en ríos salobres y aguas costeras. Si se toma en cuenta que 60 % de la población haitiana no tiene acceso al agua potable -como lo asegura Gonzalo Basile, presidente de la sección Argentina de Médicos del Mundo (MDM)- los efectos de la epidemia puede ser especialmente severos.

Basile señaló, en efecto, que el problema más urgente que enfrentan las autoridades y las instituciones es la posible propagación de la enfermedad a la ciudad capital, Puerto Príncipe, donde 1,3 millones de personas todavía viven en campamentos de refugiados, luego del terremoto del pasado 12 de enero, que dejó 250.000 muertos.

Al médico le preocupa, además, que el sistema de salud de esta nación “es casi en su totalidad privado, lo que genera grandes brechas en el acceso a la salud”, afirmó en entrevista con el Correo del Orinoco.

EL ORIGEN DE LA EPIDEMIA

En este momento la enfermedad tiene mayor presencia en la zona norte del país, específicamente en el departamento de Artibonite, y hasta el momento sólo se han detectado cinco casos Puerto Príncipe, todos procedentes de esa región.

“La epidemia de cólera nació en Artibonite, una zona que no estuvo afectada por el terremoto”
, explicó Basile, quien con base en este dato sostiene que “no se pueden vincular el sismo y la emergencia socio ambiental de la catástrofe de enero pasado con este brote”.

Advirtió, sin embargo, que la enfermedad encontró su agravante en las precariedades estructurales que tiene el sistema de salud de Haití, en las condiciones de vida de la población y en la falta de estrategias de prevención.

“En Puerto Príncipe la mitad de la población vive en espacios públicos, hacinados y en malas condiciones de higiene, lo que aumentaría la letalidad de la epidemia, que hasta el momento se mantiene en 8%”, detalló.

En los campamentos -describió Basile- las precarias condiciones, tanto de acceso al agua como del tratamiento de excretas, aunadas al hacinamiento, favorecería la propagación del cólera.

La organización MDM tiene actualmente 50 equipos de salud trabajando en los campamentos de Puerto Príncipe y adelanta labores de prevención de la enfermedad en dos departamentos de la región central del país.

DESMILITARIZACIÓN DE LA AYUDA

Basile informó que la red internacional de MDM pidió una reunión con los representantes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para plantear una acción conjunta ante la problemática haitiana.

“Creemos que en el marco de la cooperación entre nuestros países de América Latina,  la ayuda a Haití debe tener un protagonismo esencial, y pensamos que hoy es cuando tiene que estar presente la solidaridad latinoamericana”
, resaltó.

El presidente de MDM Argentina planteó que la ayuda que brinden las naciones latinoamericanas tiene que ser “humanitaria, más ligada a la salud y a la seguridad y protección social”.

Debemos abogar porque nuestros países desmilitaricen nuestra la ayuda a Haití. Actualmente los países del Cono Sur son quienes más militares aportan a la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah)”, sostuvo.

Basile indicó que Brasil, Argentina, Uruguay y Chile, naciones que poseen tropas en Haití, deben pensar en reemplazar esa presencia militar por una estrategia común diseñada por la Unasur y que se oriente a desarrollar en el país caribeño un sistema universal.

“Hay muchos países que están dando grandes aportes en ese sentido, como Venezuela Cuba y Argentina, pero lo están haciendo de manera bilateral. Nosotros planteamos la necesidad de una estrategia como bloque continental, la cual puede tener más impacto”, sentenció.

El representante de MDM manifestó que la importancia de generar un sistema universal de salud reside en que actualmente el 60 % de la población haitiana no tiene acceso a la salud debido al deficiente sistema que posee el país.

T/Yamila Blanco