“La organización médico humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) colabora con el Ministerio de Salud para brindar asistencia a una respuesta tempestiva y eficaz ante la crisis y asistir a los pacientes de Covid-19, dentro de Venezuela. Nuestros esfuerzos se enfocan en el fortalecimiento de servicios de diagnóstico, tratamiento y sistema prehospitalario, en función de las necesidades de las estructuras apoyadas”, destacó Gabriele Ganci, presidente de esta organización en Venezuela.
Este organismo se suma así al apoyo de Rusia, China y Cuba en varias áreas para ayudar a combatir esta pandemia en el país. Médicos Sin Fronteras tiene un plan de respuesta, no solo para dar asistencia con suministros médicos y contratación de personal, sino también para reforzar los servicios de triaje, diagnóstico, tratamiento, control de infecciones y sistema perihospitalario en los proyectos en los que participa en Amazonas, Anzoátegui, Bolívar, Sucre, Miranda y el Distrito Capital.
En el plan de respuesta al coronavirus, esta organización ha participado activamente en la reactivación del sistema de comunicación y de ambulancias del Sistema Integral de Atención Médica de Urgencias (Siamu) con la reparación de cinco ambulancias que no estaban operativas y que ahora están funcionando en la Gran Caracas.
El plan también incluye tres ambulancias adicionales que serán operadas directamente por los equipos de MSF y que harán tanto transporte interhospitalario de pacientes como remisión de emergencias al Hospital Vargas de Caracas. Adicionalmente atenderán casos de emergencia relacionados con el coronavirus que serán dirigidos al Hospital Pérez de León II, uno de los centros centinela ubicado en Petare y donde la organización ha estado activa con la rehabilitación de espacios, diseño de circuito de triaje de pacientes y formación de personal sobre manejo de pacientes, protección, diagnóstico y tratamiento.
Además, tomando en cuenta las limitaciones y los grandes desafíos de aprovisionamiento de material de protección, han decidido reforzar la seguridad de todo su personal que trabaja en diversos proyectos a lo largo del país continuidad a sus programas.
Asimismo, el organismo apoya a centros hospitalarios con el diseño de circuitos de recepción de pacientes para evitar que posibles enfermos con Covid-19 se mezclen con personas que padecen otras patologías. También con capacitación de personal médico y con suministro de material de protección y de limpieza y desinfección.
«La MSF se mantiene enfocada en todas las personas que sufren otras enfermedades y que llegan a diario a los centros de salud donde la organización se encuentra presente. Aunque la respuesta a la Covid-19 es una prioridad a nivel global, en los centros que MSF apoya en Venezuela no podemos bajar la guardia frente a las necesidades de pacientes con otras patologías, enfermedades crónicas o malaria, entre otras”, resalta Ganci.
DE LA MANO
Se debe recordar que Médicos Sin Fronteras trabaja desde el año 2015 en diversos proyectos en Venezuela, siempre en coordinación con el Ministerio de Salud y autoridades regionales y locales, y presta atención médica primaria, y trabaja en prevención, detección y control de enfermedades y también en rehabilitación de hospitales y puestos de salud del sistema público, distribuye suministros médicos a instalaciones y pacientes, reconstruye sistemas de agua y saneamiento de centros hospitalarios, capacita a personal médico y no médico y brinda un amplio programa de promoción de la salud.
El año pasado en Anzoátegui, 25.307 personas fueron beneficiadas por los servicios que MSF ofrece en un centro de atención sanitaria general, que aplica vacunas, y promociona la salud y la atención mental, sexual y reproductiva.
En Caracas trabaja con organizaciones locales e instituciones públicas para proporcionar tratamiento médico y apoyo de salud mental a las víctimas de la violencia sexual y eventos traumáticos en los municipios Libertador y Sucre.
En 2019 realizó 575 consultas médicas y 3.836 sesiones de salud mental. Además inició el proyecto de soporte al Hospital Vargas de Caracas, en el que se reactivó el comité de prevención y control de higiene y se lleva adelante un proceso de asistencia técnica y rehabilitación de infraestructura.
Adicionalmente, ha seguido trabajando con las autoridades en el programa nacional de lucha contra la malaria en Sifontes, estado Bolívar, una zona minera con el mayor número de casos de paludismo reportados en el país, y también apoyando al Instituto de Malariología del estado Sucre, donde los pacientes y la transmisión de la enfermedad eran particularmente altos. Las actividades de MSF en esta área en 2019 incluyeron 307.186 pruebas de malaria, 106.986 casos positivos diagnosticados y tratados entre ambos estados, distribución de mosquiteros, rociamiento de casas y campañas de promoción de la salud.
Por su parte, en Delta Amacuro MSF proporcionó apoyo logístico y técnico al programa de inmunización del Ministerio de Salud para llegar a las comunidades remotas del extremo oriental del país. En solo tres semanas fue posible administrar vacunas contra enfermedades como poliomielitis, sarampión, hepatitis B, difteria y la fiebre amarilla a 2.397 personas.