El montaje se presentará hasta el 25 de agosto en el Celarg|Menguada, la hora reflexiona en las Tablas sobre el tiempo y la espera

Los sentimientos, la soledad, los miedos femeninos, los conflictos por las costumbres sociales de una época y sobre todo, una reflexión sobre el tiempo y la espera, son los elementos que se conjugan en la obra Menguada, la hora que se presenta en la Sala de Teatro 2 del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (Celarg), de jueves a domingo hasta el próximo 25 de agosto.

La pieza, escrita por el dramaturgo venezolano César Rojas, a partir del cuento La hora menguada del recordado escritor Rómulo Gallegos, narra la historia de dos hermanas: Amelia (Rocío Mallo) y Enriqueta (Neo Rodríguez) que pasan la vida sentadas cerca de las ventanas de su casa, a la espera del hijo de una de ellas, que nunca vuelve.

La obra se desarrolla en un escenario de luz tenue, en el que las dos mujeres, que incluso han producido telarañas por el tiempo que han pasado a la espera, logran transmitir ese paso lento del tiempo que han estado frente a sus casas, con la esperanza del día que llegue la persona a quien tanto han esperado.

“Quería que las arrugas de ellas se confundieran con las arrugas de la casa y el tiempo que tenían esperando a Gustavo Adolfo, y que también se mostraran las soledades, las oscuridades de una época”, explicó el autor y director en conversación con el Correo del Orinoco.

Detalló que Menguada, la hora -realizada por Todo Producciones- también reflexiona acerca de cómo la espera “crea el sentido de insatisfacción porque no logra complacer el anhelo para la felicidad de estos seres que se quedan encerrados en sus casas, repitiendo todos los días lo mismo”.

“Es una obra que habla de la espera latinoamericana para lograr la felicidad e invita a pensar cómo nos duelen las cosas y no podemos escapar de ello”, acotó Rojas quien definió la pieza como el Esperando a Godot ( de Beckett) venezolano.

COMPLETAR UN CICLO

El dramaturgo venezolano César Rojas contó que escribió Menguada, la hora en 1992, por petición del también dramaturgo Daniel Uribe, quien le solicitó en ese entonces que tomara los perfiles de los personajes del cuento para escribir la obra con la que participaría en el Festival de Miami en Nueva York.

Contó que luego de 21 años de haber escrito la obra, decidió por primera vez este 2013 dirigir el montaje.

“La escribí siempre para que otros la pusieran en escena y el año pasado empecé a trabajar con ella como director y ha sido una gratísima experiencia. Creo que he debido hacerlo antes”, confesó.

Además, para Rojas su proceso como dramaturgo no culmina con el punto final de la pieza escrita, sino con el montaje, por lo que considera que con la puesta en escena de Menguada, la hora, que presenta en el Celarg ha completado el ciclo.

BIEN RECIBIDA

Rojas destacó que la obra ha tenido buena receptividad en los diferentes escenarios del mundo en los que se ha presentado desde que la escribió en 1992, como en Buenos Aires, Londres, México y Miami. Asimismo, recordó que la pieza se llevó los aplausos del público que asistió a la más reciente edición del Festival de Teatro de Caracas (FTC).

“En el festival la gente se levantó de sus asientos a aplaudir la obra y eso llena mucho de orgullo” afirmó.

TEATRO DE AUTOR

El dramaturgo César Rojas, quien además se desempeña como coordinador de operaciones del Celarg, destacó que la puesta en escena de piezas como estas en las salas venezolanas enaltecen el teatro de autor, que – a su juicio- no tiene como objetivo principal llenar las butacas o medir el éxito por la cantidad de público, sino hablar desde el arte.

“Nosotros no somos un teatro comercial, somos un teatro que le habla a la conciencia, a la comunidad y nuestro factor primordial no es llenar la sala, sino pronunciarnos desde una tribuna, desde un lugar en el que podamos hablarle a las venezolanas y los venezolanos de las cosas que nos preocupan, porque la dramaturgia de nuestro país es capaz de decir las cosas que los demás no dicen”, señaló.

El escritor aclaró que la idea no es que el llamado teatro comercial sea desplazado, pues considera que “siempre debe haber una alternativa”. Sin embargo, consideró importante que ambas vertientes de la escena nacional sean tomadas en cuenta por igual en las salas del país.

Rojas aplaudió la iniciativa de la Alcaldía del municipio Libertador de recuperar las salas que por varios años habían permanecido cerradas, para impulsar el teatro en todos los sectores.

T/ Sharlaine Chona
F/ Joel Aranguren