Las agencias internacionales de noticias al servicio de la injerencia estadounidense nos han vendido la idea de que lo de que ocurre en México, desde la desaparición forzada hasta las masacres, son producto de la criminalidad entre narcotraficantes o bandas delincuenciales accidentales, cuando a todas luces vemos a un Estado incidir frontalmente en la represión política, social y la promoción de la violencia para asegurarse un «momento de tranquilidad» cuando lo que se mueve entre la realidad social y subconsciente colectivo de millones de mexicanos es la pobreza y la miseria que ya no tiene como ocultarse.
Lo que clásicamente se llama terrorismo de Estado y que vivimos aquí desde 1958 a 1998
La Comisión por la Justicia y la Verdad que investiga la desaparición forzada en Venezuela ha dado una palabra de solidaridad con el pueblo mexicano y sugiero que en cada acto público que se realice en Venezuela, como los tantos que realizan a cada rato, y en toda Nuestramérica, hagamos acento en el tema, porque lo que vive México hoy lo vivimos durante 40 años los venezolanos, de eso hay documentos suficientes en el Archivo General de la Nación y en el Centro Nacional de Historia.
Pero también de lo que se trata es de conocer a través de la actualidad terrible del pueblo mexicano lo vivido por otros pueblos a lo largo de la segunda mitad del siglo XX, como una alerta ante el riesgo de posicionarse una derecha como la que hoy desgobierna México
No se trata de sentir lástima por México, como lo sugirió Porfirio Díaz a principios del siglo XX, se trata de que en el siglo XXI el mundo no puede aceptar tales atrocidades que han escalado en regiones del mundo alentadas por la ansias de dominación imperial.