El próximo sábado 11 de julio, a partir de las 4:00 pm, el público general está invitado a construir el mar en la Ciudad Universitaria de Caracas en una instalación efímera que estará dirigida por el creador visual Miguel Braceli, autor de esta iniciativa artística titulada Apologías de lo posible.
Para esta propuesta que tendrá lugar en el espacio conocido como Tierra de nadie, dentro de la Universidad Central de Venezuela (UCV), se emplearán cinco bobinas de plástico casi trasparente, las cuales suman un total de 350 metros de largo por tres de ancho. Este material será manipulado por el público para representar, de manera colectiva, el mar cuyas olas se pasearán en su vaivén desde los espacios cercanos a la plaza cubierta Carlos Raúl Villanueva para luego levantar olas que chocarán contra el edificio de la Biblioteca Central.
Como en otros proyectos anteriores de Braceli, esta experiencia efímera se eternizará en formatos como el video y la fotografía digital, soportes que permitirán posteriormente trasladar esta instalación colectiva a un espacio expositivo convencional.
En conversación con el Correo del Orinoco, Miguel Braceli explicó que el proyecto Apologías de lo posible se completará con una serie de intervenciones en espacios públicos y salas de exposición, siempre con acciones alusivas al mar.
MODERNIDAD TROPICALIZADA
“El paisaje de Caracas siempre ha tenido como figura principal al Ávila, que es como la barrera al entre la ciudad y el mar. Esta primera intervención busca construir el mar en la UCV percibida como esa ciudad dentro dentro de la ciudad, un espacio que fue como esa ciudad moderna totalizante casi omnipotente, con grandes obras de infraestructura, de arquitectura y de arte que prácticamente construyó en su conjunto el mar de manera simbólica en la medida en que pudo tropicalizar la modernidad”, justificó el artista.
Para Miguel Braceli, construir el mar es como llevar al extremo esta idea de la modernidad tropicalizada de la Ciudad Universitaria de Caracas vista además, 55 años después de su construcción, desde una perspectiva artística más sensible, más estrechamente vinculada al espectador que se convierte, no solamente en actor del hecho plástico sino además parte de la obra.
“Se trata de la construcción simbólica del mar dentro de la Ciudad Universitaria en un momento en el cual la misma aproximación al arte ha cambiado. En este caso es un proyecto efímero, participativo, hecho con el público en general pero principalmente con la gente que hace vida en el espacio y que trata de seguir pensando y repensando sus propios espacios y su propio legado”, aclaró el autor.
Apología de lo posible también pretende convertirse en un discurso plástico a favor del esfuerzo, la voluntad y el ímpetu humano para trabajar juntos y conseguir metas colectivas. Se trata de un discurso a favor de lo posible, de la voluntad “de llevar la idea de la utopía moderna a un espacio simbólico, pero también un espacio sensible creado con la participación del espectador”, agregó el artista visual.
EL MUSEO EN LA CALLE
Apologías de lo posible surgió cuando el curador Gerardo Zavarce le planteó a Braceli la intención de realizar su primera exposición individual en la Galería Universitaria. Esto se conjugó con la experiencia del creador visual en propuestas como Área y traslaciones que incluyeron la idea de hacer de los espacios públicos el lienzo sobre el cual el colectivo interviene como espectador, actor y parte de la obra misma.
En este contexto comenzaron a trabajar, desde el punto de vista conceptual, en la relación entre Caracas, el mar y la modernidad tropicalizada de la Ciudad Universitaria. De tal manera que el resultado de esta intervención efímera colectiva encerrado en los formatos de video y fotografía digital formarán parte de una exposición que se realizará en noviembre dentro de la Galería Universitaria.
Quienes participen el sábado en esta construcción plástica del mar recibirán, el día de la inauguración de la muestra en la Galería Universitaria, una fotografía firmada por el artista, documento que formará parte de en una serie exclusiva de los integrantes de esta acción.
LA COMPLEJIDAD
Aun cuando Apologías de lo posible toma como base un guión y una propuesta establecida, la propuesta extremadamente susceptible a la contingencia. En opinión del autor, lejos de ser perjudicial esa condición le da aún más potencia expresiva la instalación.
“Al final estamos todos también como actores y espectadores de lo que va a ocurrir. No solo los participantes, sino el equipo que me apoya y yo mismo tendremos que estar alerta al cambio y saber que ese cambio inevitablemente formará parte de la naturaleza de la obra. Eso es lo interesante, son obras sujetas siempre a la trasformación y la afectación”, opinó el artista.
Con esta propuesta Braceli alcanzará la quinta instalación en espacios públicos. En esta oportunidad tiene más material que en ninguna otra y requiere de una convocatoria más amplia. Será como una obra de teatro al aire libre, es como hacer una ópera en tiempo real con actores y actrices que no han ensayado”, comparó.
CÓMO PARTICIPAR
Para intervenir en esta construcción simbólica del mar en la Ciudad Universitaria de Caracas no hay ninguno requisito. Pueden participar personas de cualquier edad e incluso familias. Si bien no es una condición, es más conveniente registrase por medio de la pagina web www.proyectocolectivo.org, para establecer una comunicación y llevar un control.
“Lo importante es tener ganas de participar y estar en sintonía con el proyecto. Será una obra posible gracias a construcción colectiva y de eso va el trabajo: encontramos en un lugar público para hacer algo juntos”, acotó el artista Miguel Braceli, quien adelanta la iniciativa.