De lograrse la despenalización de la masticación de coca|Morales confía en retorno de Bolivia a Convención de Viena

El presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó este martes que espera que se acepte la despenalización de la masticación de coca para que su país regrese a la Convención de Viena sobre drogas.

Morales resaltó que espera que la campaña internacional por la despenalización de la masticación de coca tenga buen resultado y los países subscriptores de la Convención de Viena la acepten.

“Si logramos que sea aceptada internacionalmente, va a ser otro hecho histórico no solo para los productores de coca, sino para una identidad, una cultura, porque no solamente los productores “pijchamos” (masticamos) sino que lo hacen los transportistas, los estudiantes y diferentes sectores de la sociedad”, subrayó.

Además expresó que es optimista y estima que para enero habrá “buenas noticias” sobre la decisión de los países miembros.

Según el responsable de la oficina local de Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (UNODC), Cesar Guedes, precisó que hacia el 10 de enero se podrá saber si Bolivia reingresa al acuerdo.

De esta manera se le pondría fin al compás de espera abierto en junio cuando el país se retiró de la Convención de Viena.

Sin embargo, el país suramericano pidió regresar si se respeta la masticación de las hojas de coca, una costumbre de parte de los pueblos originarios de Bolivia, que incluso es respetada por la constitución sancionada en 2009.

A partir de esto, el gobierno boliviano tuvo 18 meses para explicarle a la comunidad internacional por qué debía ser despenalizada.

Ahora solo resta saber si conseguirá su objetivo, que solo podría ser rechazado en caso de que un tercio de los países miembros voten en contra de su solicitud.

Por otro lado, esta ofensiva diplomática ha llevado a que Morales, incluso, masticara hojas de coca en la sede de la ONU durante un discurso frente a la Asamblea General del organismo y lo ha enfrentado a Estados Unidos, quien rechaza esta petición por considerar que fomenta el narcotráfico.

Además su posible alejamiento de la Convención de Viena inquietó a la comunidad internacional, ya que se estima que en Bolivia hay 27 mil hectáreas de coca, materia prima para fabricar cocaína. El gobierno solo contempla como legal el cultivo de 12 mil para usos tradicionales, como masticado, infusión, y rituales religiosos.

Este era uno de los reclamos históricos de los productores de las hojas de coca, sector al que representaba Morales como sindicalista antes de llegar a la presidencia luego de enfrentarse a la privatización del agua y gas, y crear el Movimiento Al Socialismo, que lo llevó al poder.

Fuente/TeleSUR